A un año del crimen de Anahí Benitez, docentes y estudiantes de la Escuela Nacional Superior Antonio Mentruyt (ENSAM) de Banfield, al que ella concurría, realizaron este sábado por la tarde una emotiva actividad bajo el lema “verdad y justicia”, con el objetivo de visibilizar la causa y generar un ámbito de contención para toda la comunidad educativa.
La jornada tuvo lugar en el colegio al que asistía Anahí y fue organizada por docentes, alumnos y exalumnos quienes programaron diferentes actividades, por la mañana y la tarde, con el fin de que las personas que asistieran tuvieran la posibilidad de participar de las diversas acciones que llevaron adelante colectivos artísticos como “Piel de Gallina”, una organización feminista, o las murgas “Escalando sin remedio”, “Guara” y “Murga la Colifa”.
Yanella Berón, ex compañera de Anahí y organizadora de la jornada, explicó, en dialogo con DiarioConurbano.com, que la consigna es “no quedarse quietos”, y es por eso que hace un año, todos los 4 de cada mes, realizan actividades con la intención de “darse apoyo”, entre los mismos alumnos.
En cuanto a los procedimientos judiciales, la alumna aseguró que, tanto la comunidad educativa de la ENSAM como la familia de Anahí, sienten un “gran desconcierto”, ya que la causa fue reestructurada y una de las fiscales a cargo fue reemplazada.
Marcos Bazan y Marcelo Villalba son los dos detenidos acusados de homicidio, aunque la autopsia señaló que Anahí antes de morir había sufrido un abuso y de eso se lo responsabiliza a Villalba dentro de la causa que, todavía, continúa con sus líneas abiertas de investigación.
Berón adelantó que seguirán, en los próximos meses, con otras actividades culturales con el fin de exigir “justicia”, ya que sienten, según expresó, que les “arrebataron a su amiga”, y continuaran en un constante “movimiento”, hasta que la causa no tome otro rumbo y haya una condena firme.
Anahí fue vista con vida por última vez el 29 de julio del año pasado cuando se dirigía al Parque Municipal de Lomas de Zamora, pero fue hallada enterrada sin vida el 4 de agosto del mismo año en la reserva natural Santa Catalina ubicada en Llavallol.
Carolina Ortíz