El secretario general de la CICOP, Aníbal Aristizábal, definió como «muy delicada«, la situación en las guardias de los hospitales de la región, a raíz de la epidemia de dengue, aunque descartó que pueda producirse un colapso sanitario. «Hay muchísima demanda y en algunos lugares hay dificultad para hacer el diagnóstico específico de dengue», manifestó.
En diálogo con DiarioConurbano.com.ar, Aristizábal graficó la «delicada» situación que atraviesan las instituciones públicas y privadas de salud en el territorio bonaerense, que se ven obligadas a realizar diagnósticos por nexo epidemiológico ante la falta de reactivos correspondientes para realizar un diagnóstico serológico del dengue.
«Estamos en una situación en donde en una parte de la Provincia en donde se registren casos autóctonos de dengue, todo paciente que presente síntomas típicos de la enfermedad, es diagnosticado con dengue», sostuvo Aristizábal.
No obstante, a pesar de los esfuerzos realizados para optimizar los recursos, el dirigente de CICOP planteó que existen instituciones que igualmente presentan dificultades para la realización de estudios sanguíneos de rutina, (en los grados de mayor complicación de la enfermedad), debido al exponencial aumento de la demanda.
«Estamos en una situación en donde no hay registro en el tiempo cercano de tantos casos de dengue, las cifras que se presentan hablan por sí solas. Hay mucho agotamiento en el personal de salud, que incluso también se ha visto expuesto a situaciones de violencia que por supuesto no son nada agradables» denunció Aristizábal.
En ese sentido, el secretario general de CICOP puntualizó en la situación que atraviesa la Provincia y apuntó contra el «asedio económico» del Gobierno nacional, que imposibilita girar mayores partidas al área de Salud.
«La Provincia está muy delicada, bajo un asedio económico del Gobierno nacional que la está desfinanciando abiertamente, y sumado a eso los proveedores de Salud provinciales que piden sobreprecios imposibles de aceptar», sostuvo Aristizábal que remarcó que «el Gobierno nacional tiene una intencionalidad muy obvia por poner en una situación ‘dramática’ a la Provincia de Buenos Aires».
Por último, a pesar de los reparos presentados por el Gobierno nacional para fomentar la vacunación contra el dengue, Aristizábal resaltó la importancia de su aplicación en aquellos pacientes que ya hayan atravesado un cuadro de una enfermedad. «Sería ideal que los 180,000 casos que atravesaron el dengue puedan estar vacunados, porque eso va a disminuir la mortalidad de la enfermedad a largo plazo», concluyó.