El intendente de Lanús es uno de los políticos argentinos comprometidos en la investigación periodística que develó 11 millones de documentos relacionados a cuentas offshore en paraísos fiscales, no obstante, continúa con sus labores para potenciar a Cambiemos en la Tercera y buscará la próxima semana enfrentar el escándalo con énfasis en la gestión municipal.
Si bien en Lanús todavía se mantiene el silencio desde el oficialismo, la explicación pública de Grindetti sobre su vinculación con la sospechosa empresa Mercier Internacional S.A. es cuestión de días. La próxima semana, el gobierno municipal realizará el lanzamiento de su plan de gobierno a través de una conferencia de prensa, donde el jefe comunal abrirá el juego a las preguntas sobre el tema.
Hasta ahora, sobre el llamativo poder que tuvo para manejar fondos de Mercier Internacional en un banco suizo entre 2010 y 2013, el ex ministro de Hacienda porteño sólo esbozó una escueta respuesta ante un programa radial que emite el propio municipio, donde se excusó de mayores detalles por la complejidad técnica del asunto.
“Creo que es claro, ahí no hay ningún tipo de cuestión controversial. Se trata de una sociedad que no ha tenido ninguna actividad y por eso no ha sido registrada (en las declaraciones juradas). Esto para los entendidos queda claro, obviamente para los que no lo son hay que explicarlo un poquito más, pero sencillamente es una empresa que no ha tenido actividad, no ha nacido, nunca se ejerció ningún tipo de actividad y por eso no ha sido declarada. Esta es la más pura de las verdades y esto vamos a estar declarando si tenemos que hacer algún tipo de declaración formal”, afirmó en ese momento.
Para contrarrestar los focos que apuntan al intendente, la propuesta que surge desde el Palacio Municipal lanusense será dirigir las miradas hacia el plan de gestión. Sobre todo hacia un “agresivo” plan de obras, uno de los pilares de la campaña de Grindetti en un municipio deteriorado.
Mientras el PRO rearma su estrategia, desde el Concejo Deliberante es impulsada una interpelación al jefe distrital. Sin embargo, desde el entorno del gobierno local señalan que primero “tiene que prosperar en el Concejo Deliberante”. Más allá de la acción formal en el Legislativo, la postura será “recibir en el despacho a los concejales” que así lo soliciten, lejos de la interpelación deseada por los sectores duros de la oposición.
Panamá Papers aparte. O mejor dicho, en medio de los Panamá Papers, el referente macrista en la Tercera Sección Electoral no detiene su marcha en la construcción de
Cambiemos con vistas al 2017, año crucial para el safari amarillo por la Provincia de Buenos Aires, en especial por el Conurbano bonaerense. Pese al escenario desfavorable, Grindetti es uno de los pilares en la consolidación del foro de intendentes de la alianza oficialista y esta semana fue parte fundamental en el primer encuentro realizado en La Plata, del que participó la gobernadora, María Eugenia Vidal. Una demostración de fuerza.
Asimismo, también teje una red de contención con sectores exiliados del peronismo a partir de los encuentros con dirigentes como Darío Giustozzi, Baldomero ‘Cacho’ Álvarez y Osvaldo Mércuri. Junto a estos peronistas autoexiliados, con los que volverá a reunirse en los próximos días, el intendente de Lanús busca afianzar vínculos con la fuerza más importante de la provincia mientras mantiene buena relación con los intendentes del PJ que continúan dentro de la estructura partidaria. Esta construcción tiene el mismo objetivo: 2017. Pero en el medio, la lucha podría desviarse hacia el debate por el poder entre los municipios de la Provincia, una proyección que decidirá Vidal.