El fiscal Jorge Bettini Sansoni le solicitó al Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 10 de Lomas de Zamora que se condene a la pena de 20 años de prisión al acusado de asesinar al dueño de una zapatería durante un robo en abril de 2021, en la localidad de Ingeniero Budge.
En los alegatos por el crimen de Juan Yuri Conde Lozano (59), Bettini pidió 20 años de prisión más la declaración de reincidencia para Diego Adrián Cabrera, alias “Toto Cañita”, de 34 años, por el delito de “homicidio en ocasión de robo”. En tanto, la defensa solicitó la absolución.
En la reconstrucción de los hechos el fiscal analizó testimonios de testigos que en el inicio del juicio manifestaron: haber escuchado gritos en el comercio de la víctima, la presencia de un hombre que vestía una camiseta de color rosa del club Boca Juniors que caminaba rengueando en cercanías de la zapatería y el relato de un remisero que llevó al acusado hasta su domicilio.
También recordó el testimonio de un allegado del acusado que aportó el dato de que era hincha de Boca y los dichos de policías que realizaron la investigación y que afirmaron que el sujeto estaba siendo investigando por el robo de una ferretería.
La descripción del ex cuñado de Cabrera -que contó que vio cuando el imputado llegó a su casa, se cambió la camiseta y fue-, también fue mencionado por el funcionario judicial. El testigo declaró este jueves por video llamada desde la ciudad de Clorinda, provincia de Formosa, un testimonio que el fiscal consideró importante para desmentir una versión del acusado quien declaró minutos antes y dijo que ese día se dirigió hacia una cancha que queda a unas cuadras de su casa.
Cabrera en su declaración ante los jueces Susana Mabel Silvestrini, Daniel Julio Mazzini y José Ignacio Polizza aseguró que pasó por la zapatería ubicada en la calle Isaac Newton al 4000, en la localidad de Ingeniero Budge. “Ese día pasé por el lugar pero del lado de enfrente. Fui a comprar droga y volví en remis. Fui hasta la canchita y después me avisaron que la policía estaba allanando mi casa”.
Cabrera había recuperado su libertad en abril de 2020 luego de haber sido condenado por cinco delitos. “Según su declaración en este debate, acostumbraba a salir con amigos que tienen armas a robar camionetas para juntar plata. Esto es un indicio para saber a qué se dedicaba Cabrera”, expresó Bettini.
Además, el representante del Ministerio Público se refirió a una llamada que el acusado realizó a un familiar tras el hecho. “Dijo que no se quería entregar para no ir preso”, afirmó.
Por otro lado, sostuvo que “no se pudo reconstruir la mecánica de lo ocurrido dentro del comercio”. En ese sentido, explicó que se trata de un delito complejo y que por eso se encuadra en los términos del artículo 165 del Código Penal.
A su vez, Bettini solicitó que el tribunal tenga en cuenta la conducta del acusado que declaró que “cuando se queda sin dinero se dedica a robar”.
La próxima audiencia será el 3 de mayo donde el imputado tendrá la posibilidad de pronunciar sus últimas palabras antes de la sentencia.
El pedido de la defensa
A su turno, la defensora oficial Paula Rodríguez Herlein manifestó que Cabrera es “inocente” y solicitó su absolución.
En ese sentido, aseguró que el Ministerio Público Fiscal investigó y acusó a Cabrera a raíz de una afirmación recolectada a unas cuadras del hecho. Asimismo, aseguró que con la prueba que se produjo en el debate oral quedó demostrado que “no se ha podido probar el hecho”.
Luego aseguró que «no se investigó» para saber quién fue el autor del homicidio y que Cabrera está detenido porque lo mostraron como el estereotipo de “pibe chorro”.
La letrada describió como atenuantes “el buen concepto de una asistente social y el apoyo de la familia de Cabrera” y pidió que se valore la actitud del acusado quien manifestó que no tendría inconvenientes en realizar un tratamiento por su adicción.
Por último, requirió que se rechace el agravante de reincidencia solicitado por el fiscal al considerar que ya fue condenado por esos delitos.
De manera subsidiaria, la defensora solicitó el cambio de calificación por el delito de “homicidio simple” a raíz de que “no se ha podido acreditar el robo”. Y en caso de que los jueces lo condenen que se aplique el mínimo legal.
El hecho
Según la acusación, Cabrera ingresó el 28 de abril por la mañana a la zapatería de Juan Yuri Conde Lozano, ubicada en Newton al 4000, en Ingeniero Budge.
El sujeto llevaba un arma blanca y amenazó al comerciante para quedarse con el dinero que tenía en su caja registradora.
Tras tomar la plata, el detenido llevó al comerciante a un baño para dejarlo encerrado. En ese contexto, Conde Lozano se habría resistido y Cabrera le asestó 7 puñaladas y lo mató.
El delincuente huyó y fue detenido semanas después en una vivienda del barrio Olimpo en Lomas. Se había cambiado la fisonomía pero fue reconocido por testigos y por la imagen que había quedado registrada en cámaras de seguridad municipales.
En la causa intervino el fiscal Lorenzo Latorre, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 3 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora.