En la primera jornada del juicio oral contra un miembro de la Prefectura Naval Argentina (PNA) que está acusado de matar a un presunto ladrón de 16 años que intentó robarle a la salida de una fiesta de egresados en San José, partido de Almirante Brown, cuatro testigos declararon que fueron abordados por al menos cinco ladrones y que vieron un arma en poder de uno de ellos.
El prefecto Ever Hugo Villanueva, de 44 años, está acusado de disparar contra un grupo de jóvenes, uno de ellos identificado como Lucas Ismael Galván (16), falleció. El hecho ocurrió en diciembre de 2021.
Este martes, en el inicio del juicio oral que se desarrolla en el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 2 de Lomas de Zamora, cuatro testigos respaldaron la versión del imputado. Sin embargo, lo que se pone en discusión en el debate es si Villanueva actuó con un exceso de legítima defensa.
Alegato de la fiscal
Durante los lineamientos de apertura, la fiscal Marcela Dimundo hizo referencia al hecho ocurrido el 11 de diciembre de 2021 aproximadamente a las 4 de la mañana, en las calles El Tordo y López Gamarra de la localidad de San José, momentos en que el prefecto Ever Hugo Villanueva, que se encontraba franco de servicio, circulaba con su camioneta Renault Kangoo junto a cuatro pasajeros.
Villanueva estaba trabajando como conductor de una aplicación de viajes y fue abordado por varias personas con fines de robo, entre ellos se encontraba Facundo Ismael Lucas Galván, de 16 años. En ese contexto, los ladrones se apoderaron de una mochila propiedad de uno de los jóvenes que viajaban en la camioneta. En esa circunstancia, Villanueva comienza a efectuar al menos cuatro disparos con su pistola marca Bersa calibre 380, impactando dos de ellos en Galván, causándole una lesión que terminó con su vida.
La teoría de la fiscalía es que Galván no tenía arma en el momento del hecho y asegura que Villanueva “se excedió en los límites de una defensa cuando ya no había peligro”.
Dimundo hizo saber, además, que si bien durante la instrucción se solicitó la elevación a juicio por el delito de “homicidio agravado por el empleo de arma de fuego”, durante la etapa intermedia y en ocasión de que se estaba preparando un juicio por jurados ha sostenido la calificación jurídica del exceso en la legítima defensa.
Defensa
El defensor particular Juan Carlos Maggi expresó su disconformidad con los lineamientos de la fiscalía y manifestó que demostrará que Ever Villanueva actuó dentro de los límites de la legítima defensa. Al contrario de lo sostenido por la representante del Ministerio Público Fiscal, el letrado indica que “Galván estaba armado y gatilló su arma pero la bala quedó atascada”.
Testimonios de los jóvenes que viajaban con el imputado
Tras los alegatos de apertura, los jueces del TOC 2 escucharon a los jóvenes que viajaban con el imputado el día del hecho. La primera en pasar a declarar fue Jimena, quien relató que esa madrugada salía de una fiesta y un amigo solicitó un auto de una conocida aplicación para que los fuera a buscar.
“Cuando llegó el auto nos subimos y mientras yo buscaba la plata para pagar se detuvo”, contó. Según el testimonio de la chica, fue entonces que alguien abrió la puerta de la camioneta y le quitó la mochila. “Ahí fue cuando escuché los disparos”, explicó. También manifestó no recordar muchos detalles de lo ocurrido.
A su turno, Maite, otra de las víctimas, sostuvo que de repente aparecieron entre 5 y 6 chicos que rodearon el vehículo y comenzaron a abrir las puertas. “La ventana del conductor estaba abierta y por ahí vi que alguien metió un arma”, aseguró y continuó: “Escuché dos disparos y me agaché. Después de los disparos se fueron (los ladrones)”.
Maite contó que en el momento en que los ladrones abrieron las puertas, ella lanzó su celular por la ventanilla del conductor y que una vez que el vehículo se detuvo bajó para recuperarlo.
Por su parte, Lautaro, el joven que pidió el Uber describió que las tres chicas viajaban en los asientos traseros de la camioneta mientras que él iba en el de acompañante. “Cuando la camioneta comenzó a avanzar, llegaron más de cuatro personas que venían a robar. Me abrieron la puerta y me quisieron sacar el celular”, relató.
Después relató que bajó del vehículo y forcejeó con uno de los ladrones. En ese momento, escuchó disparos y el muchacho que intentaba robarle el celular se fue corriendo. El testigo contó que vio dos armas.
También declaró un licenciado criminalista y como testigo de la defensa un compañero de trabajo del imputado.
El debate continúa con más testimonios y con la lectura de los alegatos el martes 26 de marzo a las 10.