Tras las medidas que decidió tomar el gobierno nacional para transparentar los precios en los comercios a partir de que aclaren cuanto es el precio final de las cuotas y en un solo pago, el titular de la Cámara de Comercio lomense y de la Federación Económica de Buenos Aires, Alberto Kahale, manifestó sus dudas respecto a que estas iniciativas vayan a reactivar el consumo o ayuden a bajar los precios. En tanto, insistió en que “debe haber medidas que ayuden a reactivar el mercado interno”.
“Yo no sé si va a reactivar el consumo porque esto apunta a las grandes superficies más que a los comercios minoristas pero deberían controlar para que se cumpla”, advirtió Kahale en diálogo con DiarioConurbano.com y explicó que “es difícil que un comercio minorista recargue las comisiones de las tarjetas de crédito en los precios eso sucede más en las grandes superficies”.
Señaló que la medida del gobierno nacional para transparentar los precios “apunta principalmente a los bancos y a las tarjetas de crédito” y contó que desde sus organizaciones estuvieron “luchando para que bajen las comisiones pero en el Parlamento no se logró”. En este sentido, apuntó a esperar “hasta la primera semana de febrero para ver si se cumple o no” pero admitió: “No creo que se reactiven las ventas y que se dé un cambio en los precios o que vayan a bajar”.
Bajo la misma línea, el titular de FEBA sostuvo que una forma de reactivar las ventas y que los comercios bajen sus precios es “a través de una baja en la presión impositiva” al puntualizar que “no para solo por lo que cobran las comisiones de las tarjetas sino que por la financiación se paga un 10 por ciento más además se paga ingresos brutos, ganancias, bienes personales, tasas de seguridad e higiene y eso se traduce en una gran presión impositiva que va directo a los precios”.
Por otra parte, Kahale expresó sus buenas expectativas para que este año sea un poco mejor que el 2016 respecto a las ventas minoristas al confiar en que “con las obras públicas que se están realizando se replique un poco el consumo” y estimó que “a partir de marzo se va a ver un cambio que no va ser de la noche a la mañana ni un boom de compras que va mejorar el mercado interno pero siempre se confía en que va ser un poco mejor”.
No obstante, advirtió sobre la situación de que en los precios “hay un 40 por ciento de cargas impositivas que termina pagado al consumidor” y aclaró que “si hay una inflación del 30 o 40 por ciento siempre va a pegar en el bolsillo, entonces, no se apunta a que se reactive la economía”.
Asimismo, exigió a que “se reactive el mercado interno” pero reclamó que “no se logra abriendo las importaciones para que compitan con los productos nacionales porque más allá de que bajen los precios no va haber consumo”
“Hay que apuntar a una reforma general, no a un solo lugar si se quiere que el Estado recaude y estemos todos dentro. Tenemos un 40 por ciento de economía en negro, sinceramente con el 60 por ciento de la economía estancada no podes abastecer al 100 por ciento”, concluyó.