La Secretaria General de Conadu Histórica, Francisca Staiti, anticipó la realización de un paro de 72 horas para el próximo 12 de agosto ante la «grave situación salarial» que atraviesa el personal docente y no docente de las universidades nacionales, que denuncian un atraso salarial de más de un 57%. Asimismo, la dirigenta no descartó que las medidas de fuerza continúen la semana siguiente.
Ante la incertidumbre generada de cara al inicio del segundo cuatrimestre, en diálogo con DiarioConurbano.com.ar, Staiti confirmó que el 12 de agosto no comenzarán las clases en las universidades nacionales, a pesar de la convocatoria a negociaciones paritarias realizada por el Gobierno nacional para el próximo 9 de agosto a la que, confirmó asistirá el gremio.
«Una parte muy importante de la docencia se encuentra debajo de la línea de la pobreza y no podemos permitir que esta situación continúe, en este contexto tan difícil. Con la pérdida de la garantía salarial, el atraso en los sueldos se podría traducir casi en un 100%», manifestó.
A pesar de la convocatoria de última hora realizada por el Gobierno de Milei, Staiti indicó que el vínculo con el Ministerio de Capital Humano, quien se encuentra a cargo de las negociaciones paritarias con el sector, está «totalmente roto«, y responsabilizó de la situación a la actitud por parte de las autoridades de negarse a llamar a paritarias.
«Es mucha la bronca, la situación es muy grave y la realidad es que el Gobierno no muestra voluntad de negociación. Ha habido un vaciamiento de la paritaria que no creemos que pueda revertirse, por eso convocamos a las medidas de fuerza que se van a llevar a cabo a partir del próximo 12 de agosto», sostuvo.
Con el avance de la inflación y el progresivo deterioro de los salarios y las partidas asignadas para el sector universitario nacional, Staiti reconoció que se analiza la posibilidad de convocar nuevamente para el próximo mes de septiembre a una movilización en defensa de las universidades públicas, aunque de momento no confirmó una fecha tentativa para llevar a cabo la protesta.
«Queremos que las universidades sigan abiertas, que se siga haciendo docencia e investigación y por eso necesitamos salarios dignos, para garantizar un buen funcionamiento, una universidad de calidad», concluyó.
