Internas de la Unidad Penal 40 de Lomas de Zamora editaron la revista cultural “Sobreviviendo” en el marco del proyecto “A PIE” que las invitó a participar de un taller literario semanal desde el año pasado. La misma tiene cuentos, relatos y poemas escritos por las detenidas que plasmaron sus producciones en la publicación.
En diálogo con DiarioConurbano.com, Emiliano Sergio de Armas, abogado y tallerista, aseguró: “A través de los cuentos, las lecturas y escrituras proponemos un espacio para poder pensar y formar un pensamiento crítico con conocimientos nuevos. Sacar la revista es plasmar el trabajo del taller en un proyecto”. La revista se publicará dos veces por año y se espera que a mediados del 2019 se lance la segunda edición con las producciones de las 25 integrantes del taller.
Tras varios meses de reunirse en el taller, las “Guerreras”, como se autodenominan las detenidas, pudieron mostrar sus escritos en la publicación. Una vez por semana desde junio del 2018 un colectivo de funcionarios y empleados del Poder Judicial comenzaron a dar un taller literario en la unidad 40 con reclusas del pabellón 3 de mujeres y el pabellón 7 de hombres. “Tienen mucho talento creativo. Está todo escrito por ellas. El proyecto apunta a que la privación de su libertad no las prive de adquirir conocimientos nuevos y que lean autores a los que tal vez no conocen por las desigualdades educativas de Argentina”, indicó De Armas.
El proyecto fue coordinado por funcionarios del Poder Judicial de Lomas de Zamora e impulsado por el juez Roberto Conti. En este sentido, De Armas explicó que “es un proyecto autogestionado” que tiene como antecedente el que hizo el abogado Alberto Sarlo con un taller de filosofía en el pabellón 4 de la Unidad 23 de Florencio Varela.
Durante el taller trabajan la interpretación de textos, recursos literarios, debaten sobre temas actuales y realizan actividades en determinadas fechas para discutir o repensarlas en conjunto como el Día de la Memoria, Verdad y Justicia o el Día de la Mujer.
“La gran mayoría no tuvo la posibilidad de acceder a una educación formal. Tienen historias muy terribles de vida y se juntan factores como situaciones de violencia y abuso”, aseveró De Armas.
Con respecto a los espacios culturales y de aprendizaje en los centros penitenciarios, el abogado argumentó que “hacen falta más espacios así”. “Debería haber una política carcelaria a nivel general en todas las unidades porque son indispensables los espacios así. La realidad carcelaria es bastante compleja y no muy proclive a este tipo de proyectos o actividades”, sostuvo.
