Desde hace más de un año, vecinos de Fiorito sufren las consecuencias del abandono de la construcción de un aliviador. Acumulación de agua los días de lluvia, falta de iluminación en la calle, peligro de caída de postes, y la imposibilidad de ingresar los vehículos a sus casas son algunas situaciones que padecen los vecinos de la zona, según denunciaron.
Desde fines de 2013 la obra de un canal aliviador, para evitar inundaciones, se detuvo en Conesa, entre Estados Unidos y Bermejo. “Era una obra con fondos de Nación que debía ejecutar el Municipio de Lomas de Zamora. Hemos realizado quejas pero no encontramos respuestas en ningún ámbito”, afirmó Víctor Coronel, en diálogo con DiarioConurbano.com.
El vecino dijo que no hubo explicaciones por el abandono de la obra, y detalló los padecimientos. “El asfalto que había quedó todo roto y está cediendo por lo que es casi intransitable. Además, como no tenemos cloacas sale todo a la calle”, dijo.
En tanto, sostuvo que “la zona se inunda cada vez más y por el abandono de la obra hay agua estancada. Eso genera mosquitos y ratas”.
El problema de las inundaciones hace que tampoco a esas calles ingresen las ambulancias. “Es una vergüenza lo que pasa”, expresó Coronel, y sumó otra situación peligrosa: “los postes de luz quedaron flojos y corren peligro de caerse. Además, cuando abandonaron la obra no dejaron bien los cables de electricidad y no tenemos luz en la calle”.
Otro vecino de la zona de la zona, Alfredo, explicó que los perfiles – grandes barras de hierro que sostienen la obra abandonada – han aflojado la vereda y no le permiten a los habitantes del lugar dejar sus vehículos en el garage.
“Mi auto lo tengo que estacionar de noche a una cuadra y ya me han robado la bartería”, dijo el hombre en diálogo con DiarioConurbano.com, a la vez que recordó que no obtuvo respuestas tras los reclamos que hizo en el Municipio de Lomas.
Alfredo señaló que “la obra iba a ser para no inundarnos más y resulta que ahora el agua, cuando llueve, está estancada enfrente de nuestras casas”. Y añadió: “Todos pagamos los impuestos pero estamos vivienda en condiciones que no son dignas”.
En tanto, hizo hincapié en la situación de inseguridad provocada por los trabajos inconclusos. “Dejaron las calles sin luz, y de noche es una boca de lobo donde nadie quiere entrar”. En este sentido, lamentó que “muchos comercios de la zona han bajado sus ventas porque la gente no se anima y no le gusta venir por acá”.
Los vecinos anticiparon que continuarán insistiendo en busca de una respuesta ante las autoridades municipales con el fin de que se retome y finalice la obra abandonada.
