Mientras el diputado Darío Giustozzi ve disminuidas sus posibilidades de ser el candidato a gobernador del Frente Renovador, en Almirante Brown – su pago chico – comienzan a florecer fisuras en el oficialismo que prometen profundizarse. La apuesta fuerte a la reelección de Daniel Bolleteri generó mucho malestar en un grupo de concejales del massismo. Las sospechas generadas por los afiches de la precandidatura presidencial de Florencio Randazzo en el distrito no serían ajena a esta tensión interna en el oficialismo browniano.
PANORAMA// Por Alejandro Córdoba
acordoba@diarioconurbano.com.ar
Los difundidos afiches de la precandidatura de Randazzo en espacios de cartelería oficial de Almirante Brown fueron difundidos en los últimos días como la punta del iceberg de un acuerdo entre el ministro y Giustozzi. Sin embargo, fuentes del legislativo browniano señalaron a DiarioConurbano.com que, en realidad, sería todo lo contrario: una jugada urdida por un sector del Frente Renovador para restarle poder al ex intendente.
El año pasado, los concejales del oficialismo de Brown debieron sostener algunos cuestionamientos serios a Giustozzi como por ejemplo los gastos en publicidad durante el Mundial de Brasil y el manejo discrecional de los fondos para Educación depositados por el Estado nacional. A esto se sumó un dilatado proceso de renuncia a la Intendencia.
Un grupo de ediles referenciado en el diputado provincial Mariano San Pedro esperaban algún reconocimiento luego del respaldo a Giustozzi. Por ejemplo, recibir su respaldo para tener un precandidato con posibilidades de llegar a la Intendencia. Sin embargo, por ahora tienen las manos vacías.
Darío Giustozzi ya ha elegido como el candidato del oficialismo local al intendente Darío Bolletieri. “Va a apostar todo a Bolletieri porque sabe que es el único que siempre le va a ser leal y que no tiene un juego propio”, coincidieron dos fuentes consultadas por este portal. Así las cosas, las tensiones comenzaron a crecer dentro del bloque de concejales del massismo.
Un dato llamativo es que en las sospechas no aparece el nombre del único referente conocido de Randazzo en Brown: Martín Arias Duval. El director nacional de Migraciones, por ahora, se mantiene alejado de estas discusiones.
Por ahora el disgusto no se hizo público, sin embargo la aparición, la última de semana, generó distintos comentarios. Mientras algunos sostienen la existencia de un acuerdo entre el precandidato presidencial del Frente para la Victoria, otros relacionan la movida con una primera jugada del sector afectado en la interna del massismo local contra Giustozzi.
Los que sostienen esta última sospecha aseguran que los concejales enojados con Giustozzi ya habrían tirado a rodar una versión de confirmarse sacudiría el Concejo Deliberante: estarían analizando formar un bloque que responda a Florencio Randazzo, sin necesidad de volver, algunos de ellos, al kirchnerismo.
Otros, en tanto, aseguran que existe la interna en el bloque oficialista de Brown pero que los afiches están relacionados a un acuerdo implícito entre Randazzo y Giustozzi, dos viejos conocidos que nunca abandonaron una buena relación personal. “El Flaco necesita mostrar que puede hacer pie en el Conurbano y tiene que mostrarlo claramente. Entonces, qué mejor que tener afiches en un distrito massista”, estiman algunos.
Las dos lecturas tienen apoyos y detractores tanto del Frente Renovador como del Frente para la Victoria de Almirante Brown. Sin embargo, hay un tema que parece no dejar dudas: todos señalan que las posibilidades de que Darío Giustozzi sea el candidato a gobernador del Frente Renovador son cada vez menos.
Si antes – ¿o todavía? – el fantasma era el pase al massismo de Martín Insaurralde, ahora es la aparición en el massismo de Francisco De Narváez. A ellos, se les suman las intenciones de Jesús Cariglino y Felipe Solá, mientras que el Frente Renovador ya no cuenta como propio al intendente de San Isidro, Gustavo Posse.
En este contexto, las posibilidades de Giustozzi se debilitan. Esto permitiría entender porque mandó a pintar a favor de la reelección de Bolletieri y, más aún, estaría dispuesto a que no haya dos precandidatos a intendente por el massismo en Brown. El jefe del bloque de diputados nacionales del FR no estaría dispuesto a ostentar sólo esa cuota de poder si no se da su candidatura a gobernador, por eso le preocupa seguir controlando su pago chico.
En los próximos dos meses se definirán algunas situaciones confusas que vienen apareciendo en el escenario político de Brown. Entonces, se sabrá si Giustozzi peleará por el Gobernación o deberá conformarse con tener el control en su distrito original a través de un incondicional como Bolletieri. De esto dependerá si el bloque del Frente Renovador se mantiene compacto o se quiebra, y si el Frente para la Victoria puede tener más o menos chances para recuperar la comuna.
