El secretario general de ATE Lanús, Walter Pintos, convocó a ampliar la unidad de los gremios en la lucha contra las políticas de ajuste del Gobierno de Milei, de cara al inicio del paro de 36 horas convocado por la Asociación de Trabajadores del Estado para este martes a partir de las 12. «Acá no puede haber medias tintas, somos nosotros o ellos», lanzó.
En las vísperas del inicio de la huelga convocada por los estatales, Pintos reiteró su rechazo a las intimaciones enviadas por el Gobierno nacional a cerca de 10 mil empleados públicos, para iniciar los trámites de jubilación. «Más que mandar a jubilar a los trabajadores acá lo que hay que jubilar es este plan económico del Gobierno que es el mismo de la época de Martínez de Hoz y que realiza una espeluznante transferencia de ingresos de los sectores populares, los laburantes, a los grandes grupos económicos», manifestó.
La medida de fuerza anunciada por el gremio de empleados estatales sucede en sintonía con la huelga convocada por los sectores del transporte para el 30 de octubre, que incluirá la participación de camioneros, ferroviarios, aeronáuticos y docentes de todos los niveles.
«En esta lucha no puede haber medias tintas, no hay posibilidad de diálogo con este Gobierno. Aquellos dirigentes sindicales que plantean el diálogo con este gobierno, se fijan lo que favorece a sus propios negocios, porque la gran mayoría de los trabajadores están siendo perjudicados por la políticas de ajuste. Nosotros estamos dispuestos a confrontar», aseguró Pintos.
Desde ATE Lanús informaron que concentrarán a las 11 hs en la sede distrital del gremio, para posteriormente movilizar desde el Obelisco hasta el Ministerio de Desregulación y Transformación.
Contrastes
Por otro lado, el titular de ATE Lanús expuso las diferencias entre las administraciones provincial y municipal con la nacional y destacó la apertura de paritarias y mesa de discusiones en ambos órdenes, como un signo de acompañamiento a los trabajadores.
» Valoramos el esfuerzo de Provincia y del Gobierno municipal, es la clara contraparte del Gobierno nacional. Las gestiones de Axel Kicillof y Julián Álvarez consideran a los trabajadores como parte del tejido del funcionamiento del Estado, y eso es fundamental», aseveró.