El ministro de Economía y postulante presidencial de Unión por la Patria (UxP), Sergio Massa, acusó a dirigentes de La Libertad Avanza (LLA) y al sector del PRO, que lidera el expresidente Mauricio Macri, de «apelar al pasado» en la campaña electoral para sacar de foco «la inestabilidad emocional» del candidato libertario, Javier Milei, y recriminó que la oposición, ante la posibilidad de perder el balotaje, «instala la sospecha» sobre el resultado electoral.
En una entrevista publicada hoy en El País de España, único medio extranjero en dialogar con el candidato de UxP antes del debate presidencial de esta noche, Massa señaló que dirigentes de otras fuerzas políticas se sumarán a su gobierno «después del 19 de noviembre», en caso de ganar el balotaje.
Sobre ese punto, el ministro de Economía profundizó que esos dirigentes «hoy están atados a las reglas del balotaje que es ‘Milei sí o Milei no'», y remarcó que en la vereda opuesta, donde se encuentran LLA con una parte de Juntos por el Cambio (JxC), tras el acuerdo Milei-Macri, «ni siquiera usan mi nombre».
«Apelan al pasado para tratar de sacar del centro la inestabilidad emocional y la falta de praxis de gestión de Milei. Apelan a comparaciones del pasado porque en realidad tienen que esconder el candidato», explicó.
Y consideró que el electorado cuando elige presidente, escoge «quién va a cuidar a sus hijos los próximos cuatro años» y continuó: «Cuando ves desequilibrios, cuando ves violencia, cuando ves falta de experiencia, dudás mucho».
Además, diferenció a una «gran parte de la oposición que quedó en la neutralidad» como, dijo, se ubicaron «la mayoría de los gobernadores, la mayoría de los diputados, la mayoría de los intendentes» de JxC y destacó que «ellos tienen la visión no de subsumirse detrás de ningún liderazgo, sino de participar en la construcción de políticas públicas manteniendo el espíritu crítico».
Consultado por las dudas públicas que Milei planteó sobre el resultado de las elecciones generales, Massa confió que le «llama la atención» que en las PASO «cuando el resultado favorecía» al libertario, «no había sospecha» y contrastó que en el balotaje, como «pueden perder, se instala la sospecha».
«Eso ya lo hizo (Jair) Bolsonaro en Brasil, (Donald) Trump en Estados Unidos, pero el sistema argentino tiene un enorme cuidado con el sistema democrático», señaló.
Y criticó: «Esa idea de desconocer resultados, de las campañas sucias con fake news permanentes, usando usinas que son de actores económicos de afuera de la Argentina, me parece que es muy mala y que además daña al sistema democrático».
Sobre la política exterior, consideró que «lo primero que hay que hacer es salvar al Mercosur» y alertó ante las declaraciones de Milei, quien en la semana aseguró que rompería relaciones con Brasil: «Pienso en los 163 mil empleados del sector automotriz que perderían su trabajo; pienso en el sector de exportación salteño que exporta poroto y tabaco y perderían su trabajo; pienso en cómo sería la vida comercial, empresaria e industrial en Misiones que vive de la relación bilateral con Brasil; pienso en la industria bioforestal correntina y el drama que representaría para ellos».
Massa manifestó su «preocupación» por los «desequilibrios» en las propuestas del libertario, y además de la ruptura de las relaciones con Brasil, advirtió sobre «plantear que las Malvinas son de los kelpers».
Consultado sobre el primer destino que visitaría en caso de llegar a la Casa Rosada, sostuvo: «Yo no creo en eso de los símbolos del primer viaje» y contrastó que hay que «fijar una agenda de prioridades, contársela a la gente y arrancar».
«La prioridad es la política de comercio exterior y los tres mercados más importantes son el sudeste asiático, África y el mundo árabe porque son las economías más complementarias en términos de los intereses de Argentina», anticipó.
Además, señaló que el Fondo Monetario Internacional (FMI) «jugó a la política y estiró cuatro meses el acuerdo con Argentina» y analizó que «hay funcionarios» de ese organismo internacional que «sienten algún grado de responsabilidad», por lo que impulsaron la «investigación sobre el destino que tuvo el préstamo del FMI durante la presidencia de Macri».
En otro pasaje, aseguró que no cree «en los personalismos» porque las «personas están de paso y lo que trascienden son los proyectos» y por eso, dijo, tampoco cree «en el massismo».
Se definió como «un peronista de centro» que cree «que los mercados pueden ayudar a dar crédito para la inversión al sector privado argentino» y sostuvo que Argentina «necesita un esfuerzo muy grande de inversión pública» para desarrollarse y una «simplificación en el sistema de impuestos».
Sobre el índice de precios, adelantó que el año próximo Argentina tendrá «40 mil millones de dólares más de exportaciones» y «7 mil millones de dólares menos de vencimiento del FMI», y consideró a esas cifras como «una diferencia abismal» con las del 2023, lo que impactarían de forma positiva en la inflación del año entrante.
En cuanto al equilibrio fiscal, adelantó que «el año que viene es posible» de lograr y sostuvo que se va a «trabajar para ir a déficit cero, o en los posible a un punto del superávit».
Sobre su propuesta de que los candidatos presidenciales realicen un psicofísico, argumentó que en él «aparece qué remedios tomas, qué enfermedades tenés y si tenés alguna adicción».
«Yo estoy dispuesto a hacerlo, no sé si el otro candidato se anima», manifestó.