El primer candidato a concejal por Cumplir en Avellaneda, Javier Doval, aseguró estar “redoblando esfuerzos” para alcanzar el piso de representación para octubre y puntualizó en la obra pública como uno de los puntos centrales de la campaña. Además, criticó a los dirigentes del espacio que “cayeron en la trampa de la polarización” tras las PASO.
Tras obtener sólo un 4,39 por ciento de los votos, el aspirante a edil afirmo haber “revisto muchos aspectos de la campaña que hicieron que los vecinos no entiendan las propuestas” y que ahora “replantearon muchos aspectos con más presencia en las calles para acercar las propuestas tratando de que sean más claras”.
“Modificamos la comunicación en algunas con las que tienen que ver con la priorización de la obra pública en Avellaneda- Es algo que a los vecinos no les quedó del todo claro y nosotros entendemos que en un distrito donde el 30 por ciento de los habitantes todavía no tienen agua potable o red cloacal pero que en los últimos años los recursos que provienen del Gobierno han superado los 800 millones de pesos, debería estar el 100 por ciento cubierto” subrayó.
Y responsabilizó al intendente Jorge Ferraresi de “no desarrollar” las obras públicas en el distrito: “Es difícil entender cómo una ciudad que recibe tanto dinero para la inversión pública, en vez de realizar obras que dignifiquen a los vecinos, invierta y reinvierta en la avenida Mitre. Es un despropósito”.
En este sentido, criticó también al gobierno local por la “entrega de subsidios de manera discrecional” ya que “en el distrito todos los vecinos pagan la tasa de servicios generales en la boleta que es un porcentaje que tiene que ver con el fortalecimiento de centros de jubilados y clubes de barrio pero no todos reciben ese subsidio, por lo que la recaudación es universal pero el reparto es discrecional”. “Queremos un reparto universal”, remarcó.
Por otro lado, negó que su lista fuera a bajarse de las elecciones generales o darle su apoyo a Unidad Ciudadana en tanto que opinó que “los candidatos de Cumplir que perdieron la interna a alos pocos días se dieron cuenta que no era el espacio en el que querían estar”.
Y continuó: “Eso habla de la mezquindad que tiene ese tipo de dirigentes que priorizan su cuestión personal por sobre el conjunto de la fuerza política. Nosotros en 2015 creímos que Florencio Randazzo era la mejor alternativa y creemos que lo puede ser en 2019. Cuando no se permitió en 2019 no nos fuimos corriendo a otro espacio porque sería traicionar nuestras convicciones”.
Por último, cuestionó a “los dirigentes que sí han salido corriendo y han caído en la trampa de la polarización de la carta de Cristina Kirchner”. “Esa carta fue un manotazo ahogado de llamar a la unidad cuando podríamos haberla definido en una interna. Los que decidieron pedir que bajemos nuestras candidaturas para ganarle a Macri son ingenuos u oportunistas”, finalizó.