El gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, envió a la Legislatura la prometida Ley de Góndolas bonaerense, que se había anunciado algún tiempo atrás en el marco de un encuentro con prodcutores y empresarios pyme.
La propuesta busca «fomentar la competencia en góndolas bonaerenses, que tendrá como objetivo la promoción y fortalecimiento de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (pymes) de la provincia de Buenos Aires».
Del mismo modo, propone «potenciar su crecimiento y brindar un marco normativo que garantice la venta de los productos regionales mediante un sistema equitativo de comercialización».
Según establece el proyecto que ingresó al Senado, «están obligados a dar cumplimiento a la presente ley todos aquellos establecimientos con asiento en la provincia de Buenos Aires, dedicados a la comercialización mayorista y/o minorista de alimentos, bebidas, productos de higiene personal y de limpieza del hogar».
Los objetivos de la Ley de Góndolas bonaerense
La idea, según constan en los argumentos del articulado, es «fomentar la armonía y el equilibrio entre los operadores económicos alcanzados por la ley, con la finalidad de evitar que se realicen prácticas comerciales que distorsionen el mercado y la competencia de oferentes».
Del mismo modo, busca «contribuir a que el precio y la variedad de los alimentos, bebidas, productos de higiene personal y limpieza del hogar sea transparente y competitivo, en beneficio de los consumidores», como también «promover el crecimiento y desarrollo de las micro, pequeñas y medianas empresas de la provincia de Buenos Aires».
«Proteger y propiciar la inclusión comercial de productores artesanales, regionales y de la agricultura familiar, en particular a las Pequeñas Unidades Productivas de Alimentos Artesanales», señala, al tiempo que buscará también «consolidar la identidad bonaerense a través de una mayor presencia de micro y pequeños proveedores en las góndolas de los diferentes canales de comercialización».