Un hombre que se encontraba prófugo desde 2014 por el crimen de un colectivero en la localidad bonaerense de Villa Madero, por el cual tenía pedido de captura nacional e internacional, fue detenido en las últimas horas en General Rodríguez, informaron fuentes policiales.
El imputado fue capturado por agentes de la División Homicidios de la Policía Federal Argentina (PFA), quienes tenían a su cargo la investigación para dar con el acusado de ser el autor material del crimen de Leonardo Paz (22).
Voceros policiales informaron que los detectives determinaron que el prófugo podía encontrarse en la localidad de General Rodríguez, y en ese marco observaron el paso de un hombre de similares características en una bicicleta, por la ruta provincial 28.
El ciclista advirtió la presencia policial e intentó escapar, pero cayó en una zanja y luego de ser identificado, quedó detenido.
El hombre se encuentra imputado de los delitos de “robo agravado por el uso de arma de fuego en grado de tentativa, homicidio doblemente agravado criminis causa y por tratarse de un miembro de la fuerza policial en grado de tentativa y homicidio agravado criminis causa», y quedó a disposición del Juzgado de Garantías 5 del Departamento Judicial de La Matanza, a cargo de Gustavo Banco.
El crimen Paz ocurrió en la madrugada del 14 de marzo de 2014 en el interno 1030 de la línea 56, cuando la víctima aprendía junto a un chofer titular el recorrido que debía realizar con el colectivo.
Al menos dos jóvenes subieron al transporte en el cruce de la calle Boulogne Sur Mer y la colectora de la autopista Riccheri, mano a la Ciudad de Buenos Aires, a metros del ingreso al Mercado Central, en el partido de La Matanza.
«En la parada que hay justo en Boulogne Sur Mer, suben al colectivo dos personas que a la postre son los delincuentes y empiezan a despojar a los pasajeros los elementos personales», dijo a la prensa el por entonces jefe de la Superintendencia zona Oeste de la Policía bonaerense, comisario mayor Sergio Bianchi.
Otro investigador policial explicó a Télam que los delincuentes les iban robando a los pasajeros uno por uno y, luego, los hacían bajar del colectivo.
«En esas circunstancias, un agente de la Policía Federal, uniformado, desde el fondo da la voz de alto y los delincuentes dejan los elementos que estaba sustrayendo en el piso y huyen», relató a Télam el comisario Bianchi.
Según el jefe policial, en ese momento, «uno de los delincuentes que estaba huyendo, efectúa disparos de arma de fuego que impactan en el chofer y otro en la ventanilla».
Bianchi explicó que el policía no llegó a disparar su arma dentro del colectivo, sino que bajó del transporte a perseguir a los asaltantes y recién allí accionó su pistola calibre 9 milímetros reglamentaria.
«Cuando los delincuentes se alejan del colectivo, el policía desciende, los corre, los pone en fuga y mantiene enfrentamiento armado», agregó.
Los efectivos que trabajaron en la escena del crimen explicaron que fueron secuestradas vainas servidas del arma del policía pero no de los delincuentes, por lo que se supone que pudieron haber disparado con un revólver.
Paz fue auxiliado por el chofer titular que se hallaba junto a él cuando fue baleado.
«Era el chofer que le estaba enseñando el recorrido al aprendiz. Este chofer fue quien se sentó en el asiento y comenzó a manejar hasta la ciudad de Buenos Aires, para llevar a su compañero a un hospital», dijo el jefe policial.
El joven trabajador baleado murió en el Hospital Piñero, mientras era atendido por los médicos.
Mientras que horas después del crimen fue detenido uno de los acusados, a quien le secuestraron una pistola calibre .380 con cinco cartuchos completos e intactos en su interior.
