Un adolescente de 17 años se entregó este sábado en el marco de la causa por el crimen de Juan Carlos Cruz, el médico cirujano asesinado el jueves por tres delincuentes que le robaron el auto frente a su casa de la localidad bonaerense de Morón, informaron fuentes judiciales.
Por el caso ya son dos los jóvenes detenidos y al ser indagados esta mañana por el fiscal Pablo Luis Cabrejas, del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil del Departamento Judicial de Morón, uno de ellos aseguró no estar relacionado con el crimen y que es inocente, mientras que el otro se negó a declarar.
En tanto, la Policía procuraba apresar al tercer sospechoso que quedó registrado por las cámaras de seguridad al momento del asalto.
Por otro lado, los restos del médico fueron inhumados en la mañana de hoy en el cementerio Parque de Hurlingham.
El primer adolescente detenido fue el menor de ellos ayer por la tarde tras un operativo realizado por detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) Morón, mientras que el presunto cómplice se entregó esta madrugada.
Ambos fueron indagados por el fiscal Cabrejas como acusados del delito de “robo agravado por el empleo de arma de fuego y homicidio criminis causae” y quedaron formalmente detenidos, informaron fuentes judiciales.
Uno de los menores se declaró inocente y aseguró que no tiene nada que ver con el hecho que culminó con el crimen de Cruz (52).
Mientras que el otro adolescente se negó a declarar, añadieron las fuentes consultadas.
En tanto, familiares, amigos y compañeros de la víctima despidieron los restos de Cruz que fueron inhumados esta mañana en el cementerio Parque de Hurlingham.
El velatorio fue realizado ayer en la cochería Pache de Morón, desde donde partió el cortejo fúnebre encabezado por una ambulancia que tenía fotos de la víctima y con su sirena, que no dejó de sonar.
Durante la inhumación, sus familiares y amigos realizaron una suelta de globos y con aplausos lo despidieron al grito de «justicia».
A su vez, la autopsia -a la que accedió Télam- confirmó que el médico Cruz recibió un balazo que ingresó por el parietal derecho y salió por la región occipital izquierda, en un disparo que dejó en el orificio de entrada signos de «ahumamiento y deflagración de pólvora» que, según los forenses, indican que se efectuó con el cañón apoyado a «boca de jarro», lo que dejó en la lesión el denominado «golpe de mina de Hoffman».
Los forenses de la Delegación Morón de Policía Científica también informaron a la fiscalía que el proyectil provocó «un sangrado masivo, laceración de meninges y lesión de la masa encefálica incompatible con la vida», lo que derivó en «el fallecimiento de forma inmediata a la realización del disparo».
El fiscal Matías Rappazzo, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 7 del Departamento Judicial de Morón –que tuvo en principio el expediente hasta que lo derivó a su colega de menores- y los detectives de la Jefatura Departamental y de la DDI del distrito estuvieron abocados desde el jueves a identificar a los tres autores del homicidio del médico, quien se desempeñaba como jefe del servicio de emergencias en el hospital Ramón Carrillo de la localidad de Ciudadela.
Los investigadores ya saben que quien ejecutó al cirujano empleó una pistola calibre 9 milímetros, ya que en el lugar del hecho los peritos de Policía Científica lograron levantar una vaina servida de ese calibre, que ahora quedó preservada y podría ser una evidencia clave para un eventual futuro cotejo balístico, en caso de que se secuestre un arma de esas características.
A su vez, los expertos en rastros trabajaron sobre el automóvil Fiat Cronos que le fue robado a la víctima y que luego fue hallado abandonado en la localidad bonaerense de Rafael Castillo, en búsqueda de posibles huellas dactilares u otras evidencias que sirvan para identificar a los autores del hecho.
El ataque se registró a las 17 del jueves en Lanús al 3500, frente al Instituto de Enseñanza Modelo José Manuel Estrada, de Morón, cuando Cruz bajaba pertenencias, entre ellas un aire acondicionado, de su Fiat Cronos rojo estacionado en la calle.
Voceros judiciales y policiales detallaron que, en esas circunstancias, el médico fue sorprendido por tres delincuentes armados que llegaron caminando por la vereda de enfrente y le exigieron su rodado.
En esa situación, los asaltantes lo balearon y escaparon en su vehículo, mientras el médico quedó tendido en la vereda.
Vecinos dieron aviso de inmediato al teléfono de emergencias 911 y acudieron efectivos del Comando de Patrullas de Morón, quienes al llegar a la escena constataron el fallecimiento del médico.
Luego llegó una ambulancia del Sistema de Atención Médica de Emergencias (SAME), mientras que los efectivos abocados al operativo hallaron minutos después el auto robado a la víctima abandonado en la esquina de Olegario Víctor Andrade y Coronel Aguirre, en la localidad vecina de Rafael Castillo, a unas 30 cuadras del lugar en donde se produjo el crimen.
Una cámara ubicada en la esquina de la escena del homicidio registró gran parte de la secuencia de lo ocurrido, en momentos que había varios transeúntes en la vía pública.
En tanto, las cámaras del Centro de Operaciones y Monitoreo (COM) del municipio de Morón captaron el paso de los tres sospechosos minutos antes del asalto, quienes atraviesan a pie la plaza del Museo Aeronáutico, a unos 700 metros de la vivienda de la víctima.
Otra filmación del COM registró la huida de los asaltantes, quienes se desplazaron por avenida Perón, cruzaron las vías del ferrocarril Belgrano Sur y doblaron hacia la izquierda por la calle Stevenson.