Mientras la causa judicial cambió de fiscal, familiares y amigos de Miguel Alejandro “Micky” Scatolini comenzaron a pintar un mural en su memoria, en una plaza de Villa Caraza, en Lanús Oeste, cerca de donde vivía el adolescente de 14 años.
“Micky” murió al recibir un balazo de una agente de la Policía Bonaerense cuando se movilizaba en una moto junto a otro joven. Aunque la policía informó que los jóvenes venían de cometer un robo en Villa Jardín, eso no fue acreditado y Scatolini no estaba armado.
Por esto la familia de Micky y sus amigos vienen denunciando que este hecho – ocurrido el 9 de noviembre último – fue un “fusilamiento”.
“Todavía no logro entender lo que pasó. Por qué los policías actuaron de esa manera”, dijo María del Carmen Ayala, madre del adolescente muerto por una bala policial.
En tanto, recordó con dolor y bronca las explicaciones que le dieron a su hija en la Comisaría
De Villa Industriales. “Primero le pidieron disculpas y después le dijeron que había sido una equivocación”, señaló, en diálogo con DiarioConurbano.com.
Ayala recordó a su hijo como un chico muy activo. “Estudiaba y le habíamos puesto un pequeño lavadero de autos en casa junto a sus hermanos para que no anduvieran en la calle”, contó.
En tanto, dijo que luego del hecho se acercaron tanto el intendente de Lanús, Darío Díaz Pérez, como su esposa, la diputada provincial Karina Nazabal.
“Queremos llegar hasta el fondo, hasta que se compruebe la responsabilidad de los policías en la muerte de mi hijo”, afirmó María del Carmen Ayala. Micky tenía cinco hermanos.
En el plano judicial se esperan las pericias de balística y un informe más detallado de autopsia. En tanto, la causa pasó de la UFI 1 a la UFI 4 de Responsabilidad Penal Juvenil de Lomas de Zamora, a cargo de la fiscal Isabel Lanfranchi,por una cuestión de turno judicial al momento del hecho.
Hay un dato importante en este plano. Si bien la causa está caratulada como robo, la familia Scatolni fue aceptada como particular damnificada, a la vez que la fiscal no dispuso que declaren como testigos los policías. Este último hecho deja la puerta abierta para que en algún momento puedan ser imputados por la muerte de Micky Scatolini.
Los policías que mataron al adolescente se encuentran identificados. Son miembros del Comando de Prevención Comunitaria, de Lanús. Se trata de Melisa Belén Trefiletti y Maximiliano Boris Quiroz.
Micky murió al recibir tres balazos cuando se movilizaba en moto por la calle Chubut al 2700, en el barrio de Villa Jardín, en Lanús Oeste. El adolescente iba de acompañante. El conductor se ese vehículo escapó cuando los policías dispararon contra Micky y aún no fue encontrado.
“Luego del hecho, aparecieron dos mujeres que dijeron que habían sido asaltadas por dos jóvenes que iban en una moto. Se trataba de dos hechos ocurridos a unas 10 cuadras del lugar. Este fue el argumento de la Policía para matar de tres balazos a Micky que iba desarmado”, sostuvo Gustavo Arnaiz, abogado de la familia del adolescente, en diálogo con DiarioConurbano.com.
Tras recibir los tres balazos que -según las primeras pericias – partieron del arma de Melisa Trefiletti, el joven murió en el Hospital Evita de Lanús.
“Instantes después, desaparecieron tres vainas servidas y dos proyectiles policiales. Evidentemente el protocolo de preservación de la escena del hecho fue violado. La irregularidad aumento con la aparición de dos armas obsoletas que dicen haber hallado 40 minutos después en la cuadra donde transeúntes y curiosos nada vieron”, denunciaron los familiares de Micky.
Arnaiz contó que “un proyectil pudo ser rescatado gracias a que el disparo ingresó a un automotor estacionado y cerrado con llave”. Y señaló que la semana pasado se efectuó una pericia a las armas secuestradas por la policía. “Quedo claro que ambas armas sembradas por la policía carecían de la aguja percutora y que la mujer policía que disparó utilizaba munición prohibida que solo se autoriza para la caza mayor. Fue una embista policial por justificar lo injustificable, en la cual el personal de la Comisaría de Villa Industriales no estuvo ajeno”.