La familia de Bautista, el niño de 9 años atropellado por un patrullero en Villa Fiorito, pide la detención de los culpables de la muerte del menor. El hecho ocurrió en noviembre pasado.
Felipe Bautista Yedro falleció la noche del 4 de noviembre en la calle Necol al 1000 luego de que un patrullero lo embistió mientras se encontraba, junto a su hermano mayor, asistiendo a su hermano menor y a su primo ya que ellos anteriormente también habían sido atropellados por el mismo móvil policial.
El único policía que había sido detenido por el hecho fue liberado a 9 días de la muerte del menor por razones que la familia desconoce. «Nunca nos explicaron por qué lo liberaron, a nuestro abogado todavía no le dieron acceso a la causa», explicó José, tío de la víctima, en comunicación con DiarioConurbano.com
La causa que lleva el fiscal Carlos Patricio Pérsico de la Unidad Funcional de Instrucción (UFIJ) 10 especializada en Delitos Culposos está caratulada como «homicidio culposo», familiares de Bautista reclaman que la carátula sea modificada y pase a ser «homicidio doloso».
Según detalló José en diálogo con este portal, los padres del niño de 9 años se apoyan mucho en la iglesia y eso los ayuda desde el lado sentimental pero resaltó que siguen mal al saber que quienes le quitaron la vida a Bautista no están presos.
«El hermano mayor de Bauti perdió el trabajo por faltar muchos días ya que se sentía mal emocionalmente pero se recupero bien el hermanito más pequeño», explicó el tío de la victima.
Anteriormente, la familia, denunció irregularidades en la causa, reclamaron que nunca se preservó la escena del hecho y que además en el momento que los vecinos empezaron a reclamarle a los policías que asistan a los menores heridos estos comenzaron a reprimir con balas de gomas.
El hecho:
Agustín Pogonza y Tomás Yedro, primos entre sí, manejaban sus motocicletas de regreso a su domicilio en la localidad de Villa Fiorito, luego de haberse reunido con familiares para ver el partido correspondiente a la final de la Copa Libertadores.
Según explicaron las fuentes, junto a Pongonza viajaba en la parte trasera de la moto su sobrino, de 5 años; mientras que Yedro era acompañado su hermano de 9 años.
En ese contexto, la moto de Pogonza fue impactada desde atrás por un móvil de la Comisaría 7ma. de Villa Centenario, y por tal motivo, el niño quedó herido y tendido sobre la vía pública. Ante esa circunstancia, la motocicleta manejada por Tomás acudió para ayudar y trasladar al menor de edad a un hospital.
Sin embargo, cuando el joven disponía iniciar su recorrido hacía un centro de salud, con sus dos hermanos en la parte trasera, fue chocado nuevamente por ese mismo patrullero cuando el vehículo policial disponía hacer una maniobra marcha atrás.
Como consecuencia de ese segundo impacto, Felipe Bautista Yedro, falleció en el acto producto de un «aplastamiento».
