En un operativo llevado a cabo en Fiorito, personal policial detuvo este miércoles a un peligroso sicario conocido como “Cato”, quien era buscado por su implicación en dos homicidios agravados, incluyendo el asesinato a Ramón Adán Zurita, ocurrido el 1 de enero en Merlo.
El nombre real del sospechoso es Catalino Cabañas, de nacionalidad paraguaya y 42 años de edad, quien contaba con al menos dos órdenes de captura y fue descubierto en la localidad de Fiorito tras una extensa investigación policial para dar con su paradero.
El hombre fue ubicado en la zona de las calles Antonio Filardi y Baradero. A partir de entonces, se intensificaron las tareas de seguimiento con la colaboración de la Delegación Lanús de la Dirección General de Inteligencia, hasta que se logró confirmar que el sospechoso residía efectivamente en el lugar mencionado y se ordenó su aprehensión inmediata.
“Cato” era buscado por dos crímenes. El primero de ellos ocurrió el 31 de diciembre de 2023, donde la víctima, de Omar Ovidio Condarco Collisaya, de 37 años, fue asesinada en la calle San Pedrito al 500 en el barrio de Flores. Este caso está bajo la intervención del Juzgado en lo Criminal y Correccional Nro. 38 de CABA.
El segundo homicidio sucedió menos de 20 horas después, el 1 de enero de 2024, y tuvo lugar en la calle Nolasco y Almirante Brown, en el partido de Merlo. La víctima fue Ramón Adán Zurita, de 67 años, a quien ejecutaron de un tiro en la cabeza en la tarde del primer día del año, en la puerta de la casa de una de sus hermanas y sin mediar palabras.
Por esa razón, los investigadores vieron el intento de robo como la hipótesis más alejada y rápidamente trabajaron en la posibilidad de que se tratara de un ajuste de cuentas.
Debido a cómo se desarrolló, este caso -en el que intervino el Juzgado de Garantías Nro. 4 del Departamento Judicial de Morón- generó una gran repercusión mediática a nivel nacional.
En los videos se observan tanto el auto de la víctima, un Nissan, como el del sicario, que es un Chevrolet corsa gris. A ese último se lo visualiza entrando por una calle de tierra ubicada a 50 metros del lugar donde sucedió el crimen de Zurita.
Sin embargo, a partir del rastreo de su patente, se corroboró luego que tanto el homicidio de Merlo como el del barrio porteño de Flores estaban relacionados. Esto se comprobó porque el mismo Corsa había sido identificado en la escena del asesinato que había ocurrido el día anterior.
Ante la gravedad de los delitos, las autoridades policiales comenzaron una exhaustiva investigación para dar con los responsables de los homicidios. Entre las tareas realizadas, se mantuvieron comunicaciones constantes con las autoridades judiciales, requiriéndose una orden de allanamiento -emitida por la UFI N° 5 de Merlo- y el secuestro al domicilio donde se encontraba el prófugo. Mientras tanto, se montó una consigna encubierta para vigilar de cerca al sospechoso.
Fue durante las tareas de vigilancia que los investigadores advirtieron la presencia de “Cato” en la vía pública, procediendo de inmediato a su interceptación. Al ser identificado como Catalino Cabañas, se efectuó su detención sin que opusiera resistencia.
Posteriormente, se informaron los hechos a las autoridades judiciales de intervención, quienes ordenaron el traslado inmediato de Cabañas a la UFI Nro. 5 de Morón a la espera de que el juzgado de CABA proporcione las directivas correspondientes para la continuación del proceso judicial.