Pasaron más de tres meses del asesinato de Vanesa Abril Benítez, ocurrido a la salida de una fiesta en Ingeniero Budge. Aún no hay detenidos ni sospechosos identificados. La preocupación crece en el entorno de la joven ya que temen que el caso quede impune.
Fuentes judiciales informaron a DiarioConurbano.com.ar que “en la causa por el momento no hay ni detenidos ni imputados con pedido de detención”.
La única certeza de los investigadores, por el momento, es que no se trató de un intento de robo sino que fue consecuencia de un problema previo entre la víctima y los agresores.
“Los testigos del caso aportaron muy poco y eso dificulta todo”, se lamentó uno de los investigadores. La sospecha es quienes declararon en el expediente conocen más de lo que contaron.
Todo comenzó alrededor de las 5 de la madrugada del 25 de marzo cuando Vanesa Abril Benítez, de 25 años, salió de una fiesta privada, junto a una amiga de 17 años, en la esquina de Cafayate y Falucho, en Ingeniero Budge.
Las jóvenes abordaron un remise y cuando estaban por arrancar apareció un joven con ropa deportiva y comenzó a dispararle a la parte posterior del auto, donde se encontraban las pasajeras.
Uno de los disparos dio en el tórax de Vanesa Benítez, mientras que otro impactó en su nuca. Su amiga resultó ilesa.
Según indicaron fuentes policiales, el remisero trasladó a la joven herida donde fue atendida de urgencia y luego trasladada al Hospital Gandulfo.
Sobre el móvil del feroz ataque, las fuentes consultadas descartaron de plano un intento de robo y aseguran que el agresor y la víctima se conocerían y habrían mantenido un altercado poco antes del hecho.
La investigación se encuentra a cargo del fiscal Ricardo Silvestrini, titular de la UFI 11 de Lomas de Zamora.
