La causa por el crimen de Darío Cancino, ocurrido el 5 febrero de 2018 frente a su casa de Ingeniero Budge, no tiene imputados. Lo único certero sigue siendo para los investigadores que se trató de un “ajuste de cuentas”, aunque no se sabe si los asesinos se confundieron o no de víctima, informaron fuentes judiciales.
Cancino, luego de recibir diez balazos, agonizó durante diez días en el Hospital Gandulfo de Lomas y falleció. Con él se fue bruna parte de las posibilidades de dar con el asesino.
El 5 de febrero de 2018, alrededor de las 23, una persona golpeó la puerta de la vivienda de Cancino, ubicada en Bariloche al 2300, en Ingeniero Budge.
Cancino habría reconocido al hombre que golpeó la puerta, quien se encontraba en una moto. Cuando la víctima comenzó a hablar con el sujeto pasó un auto Bora color gris, se bajaron al menos cinco hombres encapuchados y comenzaron a dispararle al dueño de la vivienda. Luego huyeron.
Los peritos indicaron que se dispararon por lo menos treinta tiros, diez de ellos impactaron en el cuerpo de Cancino.
La familia de Darío Cancino siempre creyó – aunque no se pudo comprobar – que la agresión era para una persona allegada al joven, quien habría estado vinculado a otro crimen, ocurrido unos días antes también en Ingeniero Budge.
“Hay pocos datos por chequear. Estamos buscando algunos elementos nuevos para fortalecer alguna sospecha, pero no hay mucho”, confesó uno de los investigadores.
La causa – caratulada “homicidio agravado” – se encuentra en la UFI del Departamento Judicial de Lomas de Zamora, a cargo del fiscal Sebastián Bisquert.
