En la cuarta jornada del juicio por abuso sexual infantil contra el hijo del cantante de música popular, Antonio Ríos, declararon un psiquiatra que asiste a la víctima y los abuelos de la menor. Además, el imputado se careó con su ex pareja para desmentir sus dichos.
La causa que se sigue contra Daniel Ríos (33), es por abuso sexual reiterado agravado por haber sido cometido contra una menor aprovechando la situación de convivencia preexistente y configurar un sometimiento gravemente ultrajante. En el debate interviene el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 5 de Lomas de Zamora quien dispuso un cuarto intermedio hasta el próximo martes a las 9.
El psiquiatra Mariano LLusa, quien evalúa a la menor desde hace aproximadamente un año, indicó que durante la primera consulta la víctima reconoció el abuso sexual infantil que había denunciado su madre y que esa persona había sido pareja de su tía. Refirió que atiende a la paciente una vez por mes.
LLusa contó que “en algunas oportunidades” la adolescente se realizó cortes en su cuerpo y que le había dicho que era “para transitar situaciones de mucha angustia y ansiedad”.
El especialista relató que hace unos meses la madre de la menor le transmitió que su hija se autolesionó porque “había recordado detalles de lo sucedido y habría dicho que hubo acceso carnal, que por ese motivo necesitaba ampliar su declaración”. En ese marco, explicó que tuvo algunas conversaciones con la psicóloga de la víctima donde se evaluó la posibilidad de medicarla, pero que al final no fue necesario.
“Era un hijo para nosotros”
Este miércoles declararon Olga y Arnaldo, los abuelos de la víctima. En el momento en que habrían ocurrido los hechos, la madre de la víctima con su hija y sus padres vivían en la planta baja. En la parte superior Ríos junto a la tía de la niña.
La primera en declarar fue Olga, quien se refirió al momento en que su nieta se animó a hablar y le dijo: “Daniel abusó de mí”.
“La abracé y le dije que tenía que avisar a la madre. Ella me dijo que no, tenía miedo porque él la había amenazado con el arma. Le dijo que iba a matar a su mamá. Después me enteré todas las barbaridades que pasó mi nieta”, expresó.
Olga y su esposo manifestaron que Ríos “era como un hijo”, y que quedaron “shockeados” cuando su nieta habló por primera vez. También declararon que la víctima “cambió mucho” y que pensaron que esa conducta “se debía a su crecimiento”.
El abogado Alfredo Drocchi, defensor de Ríos, interrogó a los testigos sobre los supuestos abusos y nuevamente los hostigó con cuestiones personales y dolorosas como la pérdida de un familiar. Esa situación hizo que tuvieran que retirarse de la sala de audiencia llorando. El tribunal en varias ocasiones tuvo que intervenir y pedir que la defensa respete a los testigos.
Careo de Ríos con su ex pareja
Tal como fue solicitado en la jornada anterior, el imputado pidió declarar para desmentir afirmaciones realizadas por Aldana, su ex pareja y tía de la víctima, cuando testificó ante el TOC 5.
Durante su declaración, Ríos respondió las preguntas de su defensor, relacionadas con: el año en que ingresó a la Policía de La Ciudad de Buenos Aires, la relación de la pareja, los motivos de la separación, y las conductas de las mascotas de la pareja con otras personas. Luego manifestó: “No quiero responder más preguntas, quiero el careo”.
Minutos después, pusieron cara a cara a la ex pareja con el fin de que confronten respecto de sus versiones.
En la jornada anterior, Aldana había dicho que “en 2016 casi no se veía con Ríos porque tenía horarios rotativos”. La mujer también es policía y contó que se egresó un año antes que el imputado. En tanto, Ríos señaló que durante el año 2016, él “la llevaba siempre a su trabajo”.
En cuanto al motivo de la finalización de la relación, la mujer había dicho que terminó la convivencia el Día de la Madre del año 2018, pero que continuaron viéndose todo el año 2019. Por su parte, Ríos dijo que la relación terminó en octubre de 2018 y que después se siguieron viendo hasta el 14 de julio de 2019.
El juicio continúa con el próximo martes a las 9, con la declaración de los testigos de la defensa.
El caso
Según la acusación, los abusos ocurrieron entre 2016 y el 2018, cuando la niña tenía 8 años y hasta sus 10 años aproximadamente, en una misma vivienda dividida en dos pisos ubicado sobre la calle Florencio Sánchez al 1400 de Lomas de Zamora. En la planta baja vivía la madre de la víctima con su hija y sus padres y en la parte superior Ríos junto a la tía de la menor.
En ese contexto, Daniel Ríos en reiteradas oportunidades y aprovechando la ausencia de la madre de la niña que se encontraba al cuidado de sus abuelos en el lugar, con la excusa de ayudarla con las tareas de la escuela abusó sexualmente de ella mediante tocamientos y actividades sexuales mientras la amenazaba con un arma: “Si vos contás algo yo mato a tu mamá”.
