Este martes comenzó el juicio contra un hombre de 38 años acusado de asesinar a puñaladas a su madre e intentar simular que se había tratado de un robo. El hecho ocurrió en marzo de 2022 en el barrio San José, partido de Almirante Brown.
Se trata de Gerardo Rodríguez, quien llegó a juicio oral imputado por el delito de “homicidio agravado por el vínculo” por el crimen de su madre, Alba Irene Troche, de 64 años.
El juicio se desarrolla en el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 10 de Lomas de Zamora, y por ahora sólo está prevista una segunda jornada el 31 de agosto, aunque podría agregarse una fecha más. La acusación está a cargo del fiscal Jorge Bettini Sansoni.
La primera en declarar fue Patricia Rodríguez, hija de la víctima, quien apuntó contra su hermano y pidió a los jueces del TOC 10 que “se haga justicia”. En primer lugar, la mujer describió cómo era la relación entre el acusado -quien vivía en la parte delantera del terreno- y su familia. En ese sentido, detalló que el hombre, su pareja y sus tres hijos se mudaron a ese lugar cuando falleció uno de sus hermanos y que en el fondo del terreno se encontraba la casa de sus padres.
“Mis padres siempre vivían angustiados porque los nenes (por los hijos del imputado) estaban mal atendidos, vivían en la casa de sus abuelos. Gerardo no trabajaba, siempre vivía de ellos (de sus padres)”, contó la mujer. Y agregó: “Mi papá siempre le decía ‘¿cuándo pensás progresar?’”.
Al ser consultada, si previo al hecho, “faltaba algo” en la casa de sus padres, la testigo contestó: “Siempre faltaba algo. Faltaban cadenitas de oro de mi mamá y herramientas de mi papá”.
Luego relató que la noche antes del crimen, su madre cenó pizza en su casa y luego la llevaron hasta su domicilio ubicado en la calle Jorge Santiago Bynnon al 4800, en el barrio San José, en donde residía la víctima. Al otro día, cerca de las 7:20, recibió un llamado.
“Mataron a mamá. Entraron a robar, eran dos y la mataron”, le dijo su hermano, quien aseguraba que alcanzó a ver a dos sujetos que escapaban por los techos de las casas vecinas.
A su vez, comentó que la policía encontró en poder de su hermano el celular y las llaves de la casa de su madre. “La policía le preguntó (a Gerardo) de quién era la llave y él dijo que era del trabajo. La policía probó (la llave) y abría la casa de mi mamá”, recordó.
También declaró Daiana, sobrina del acusado, quien vivía con la víctima. Según su testimonio, su tío “nunca” tenía trabajo. “Ellos comían gracias a mis abuelos (por la familia del acusado)”, expresó.
Por otro lado, la joven manifestó ante los jueces que luego del hecho desapareció su secador de pelo y que una semana después fue hallado en una casa donde se realizó un allanamiento en el marco de una investigación por droga, a unas cuadras de la casa de la víctima. La familia sospecha que el acusado solía frecuentar ese lugar.
En sintonía con lo anterior, la hermana del acusado, también mencionó en su declaración que faltaba el televisor de la habitación de su madre. “Una vecina me contó que esa noche una persona vio a Gerardo con la tele, que se dirigía hacia esa dirección (por la casa allanada)”.
El hecho
Todo ocurrió el 26 de marzo de 2022 en una casa ubicada en la calle Jorge Santiago Bynnon al 4800, en el barrio San José, partido de Almirante Brown, en donde residía la víctima, identificada como Alba Troche.
Efectivos de la comisaría tercera de San José acudieron al lugar tras un llamado al 911 y al llegar se entrevistaron con Gerardo Rodríguez (38), hijo de Troche, quien les refirió que alrededor de las 5 de la madrugada escuchó abrirse la puerta de su madre, que vive en el fondo del mismo terreno.
De acuerdo al relato del hombre, una hora y media más tarde se dirigió hacia la casa de su madre y la encontró tirada en el piso del comedor fallecida, con heridas de arma blanca en el cuello.
Asimismo, aseguró que vio a dos hombres que escapaban por los techos, según fuentes policiales.
Los uniformados solicitaron de inmediato una ambulancia y preservaron la zona a la espera de los agentes del Grupo Táctico Operativo (GTO), quienes establecieron que dentro de la propiedad no había nada revuelto, ni faltantes ni signos de violencia, tanto en puertas como en ventanas.
De esta manera, los policías dejaron constancia de que el relato del hijo de la víctima no era coincidente con la escena.
En tanto, el médico del servicio de asistencia constató que la mujer presentaba lesiones punzocortantes en el cuello.
El fiscal Javier Gramajo, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora dispuso la presencia de la Policía Científica en la escena del crimen y el relevamiento de cámaras de seguridad y testigos.
En ese marco, se llevó a cabo un allanamiento en urgencia en la vivienda del hijo de la víctima, donde se encontró el teléfono celular y la llave de la puerta de Troche.
A raíz del hallazgo, de los testimonios de testigos y de la falta de pruebas que indicaran el ingreso de personas extrañas a la casa, ya que las aberturas no estaban forzadas, el fiscal Gramajo dispuso la detención de Rodríguez por el delito de “homicidio agravado”.
