La familia de Macarena Sánchez, una joven de 26 años, embarazada de seis meses, que fue encontrada muerta en su casa de la localidad de Wilde, partido de Avellaneda, asegura que hay pruebas suficientes para demostrar que se trató de un femicidio y reclama justicia. Por el hecho fue detenido la pareja de la víctima pero recientemente recuperó su libertad tras una resolución de la Cámara de Apelaciones de Lomas.
El hecho ocurrió el 12 de agostó pasado, en una vivienda ubicada en Pasaje Mauricio entre Raposo y Pasaje Perón en Wilde. Según la investigación, un llamado al 911 alertaba sobre un posible homicidio.
Al llegar al lugar, los efectivos se entrevistaron con un hombre de 28 años, que relataba que había mantenido una discusión con la víctima, tras lo cual abandonó la casa. Al regresar, siempre según su declaración, encontró a la mujer embarazada de seis meses, con una soga en el cuello. Sin embargo, la familia de la chica asegura que se trató de un homicidio y acusan a su pareja.
Tras el hecho, la fiscal María Laura Carballal, de UFI N° 2 de Avellaneda, dispuso la detención Elio Benel Padilla, por el delito de “Homicidio agravado por el vínculo en contexto de violencia de género”.
Hace unos días, la familia de Macarena se enteró que la Sala Tercera de la Cámara de Apelación y Garantías de Lomas de Zamora le otorgó la excarcelación al acusado, concluyendo que “no existe” -al menos de momento- motivos para que continúe con la privación de su libertad, y todo fue desconsuelo.
En diálogo con DiarioConurbano.com.ar, Jesica Ledesma, la tía de la víctima, contó: “La fiscal nos dijo que ella puede demostrar que fue femicidio. No entendemos por qué desde Lomas de Zamora le dieron la libertad”.
De acuerdo a la declaración de la tía de Macarena, entre los argumentos que expuso la Justicia para liberarlo surge que “no hay denuncias por violencia de género recientes”.
“La Justicia dice que hay indicios de que ella tuvo una muerte traumática y que hubo golpes, pero los padres de él declararon que los golpes fueron ocasionados por vecinos con los que ella habría tenido problemas previo al hecho. También dicen que los golpes recientes se los hizo ella”, explicó la mujer.
Y agregó: “Él la mató y cuando llegó la policía fingió que estaba haciéndole RCP. Dijo que se suicidó. Si ella se hubiera suicidado por qué no le avisó a mi mamá que vive enfrente. Nosotros fuimos los últimos en enterarnos. Esto estuvo silenciado y una vez que llegó la familia de él llamaron a la policía”.
Para la familia de la víctima, hay pruebas suficientes para demostrar que se trató de un femicidio. “Hay cámaras en el barrio que podrían mostrar que cerca de las diez de la noche ya la venía pegando en el pasillo de la casa. Además, hay personas que los vieron y escucharon que la discusión empezó temprano pero no quieren declarar porque tienen miedo”, aseguró Jesica.
Macarena y Padilla estaban en pareja prácticamente desde la adolescencia. Eran padres de cuatro niños, que quedaron al cuidado de la mamá y las hermanas de la víctima, quienes exigen justicia.