A casi tres años del crimen de Rodrigo González, asesinado cuando estaba en un cumpleaños y lo mató de un tiro un ladrón, en Villa Galicia, Temperley, el miércoles 29 comenzará el juicio oral en el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 4 de Lomas de Zamora contra el único imputado en la causa, Gabriel Castro.
Castro está acusado por el delito “robo agravado y homicidio criminis causa, ambos en tentativa, y homicidio agravado”, imputación que tiene una pena máxima de prisión perpetua.
El debate está previsto para el miércoles a las 9.30 horas y se extendería por dos jornadas hasta su sentencia. El fiscal del caso es Hugo Carrión.
El asesinato de Rodrigo conmocionó a los vecinos de la región y dio lugar, una vez más, al reclamo de más seguridad. El joven, de 35 años, era padre de un niño que hoy tiene 11 años.
“Tenemos todo a favor. No tiene muchas chances de inventar cosas. Hay muchas pruebas que lo comprometen así que estamos tranquilos por ese lado”, contó Florencia, la viuda de Rodrigo, en diálogo con DiarioConurbano.com.
Luego, manifestó que espera que el acusado “no salga nunca más” de prisión y agregó: “Por suerte llegamos a juicio oral pronto. Esto no nos va a aliviar el dolor que sentimos, pero por lo menos vamos a estar tranquilos si este hombre es condenado”.
El hecho
El hecho ocurrió el 17 de agosto de 2019, pasadas las 21, en Zuviría al 400, casi esquina Gral. Iriarte, Temperley. Rodrigo González estaba en una habitación de la casa mientras se festejaba un cumpleaños.
Minutos antes, un delincuente armado había intentado sustraer un vehículo sobre la calle Iriarte al 800 pero como se tiroteó y no pudo terminar de cometer el delito, junto a otro delincuente, fue hasta la vuelta, sobre Zuviría, donde vio que un hombre descendía de un vehículo e ingresaba a una casa.
Según la acusación, Castro pasó por el frente de esa vivienda y disparó en varias oportunidades contra ella. Uno de los balazos ingresó por la ventana e impactó en el pecho de González. El hombre de 35 años murió horas más tarde en Hospital Gandulfo, tras ser operado.
El delincuente, en tanto, continuó su raid delictivo, robó una camioneta a pocos metros y escapó. Castro fue detenido en la vivienda de sus padres en Isidro Casanova. Presentaba una herida compatible con la que los testigos vieron que tenía tras el tiroteo con el vecino de Temperley al que intentó robarle la camioneta. Además, se había cortado el pelo para no ser reconocido.
Las imágenes de cámara de seguridad de la zona fueron claves para reconocer a Castro y dar con el acusado de asesinar a Rodrigo González.