Dos de los tres acusados de asesinar a balazos a un policía cuando iba a trabajar, en un hecho ocurrido en febrero de 2020, en Ingeniero Budge, resultaron absueltos en el marco de un juicio oral en el que no se pudo comprobar fehacientemente su responsabilidad en el hecho.
Fuentes judiciales informaron a DiarioConurbano.com que el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 9 de Lomas de Zamora absolvió a Marcelo Ezequiel Jara y Pablo Sebastián López del delito de “homicidio en ocasión de robo agravado por haberse cometido con violencia hacia las personas, ejercida mediante el empleo de arma de fuego, y por haberse cometido con intervención de un menor de 18 años de edad”, en perjuicio de Rubén Eduardo Ibarra.
Por el caso, hay otro tercer joven detenido pero como al momento del homicidio era menor de edad, será llevado a juicio más adelante.
El crimen
Rubén Eduardo Ibarra, de 53 años, era un suboficial retirado de la Armada. El 7 de febrero de 2020 se dirigía a tomar el colectivo a la parada ubicada en Claudio de Alas y Recondo, en Ingeniero Budge.
Unos metros antes, en Claudio de Alas y Quesada, Ibarra – quien trabajaba como custodio en una empresa transportadora de caudales – fue interceptado por una camioneta Ford Eco Sport en la que se movilizaban tres sujetos.
De acuerdo al informe policial, los delincuentes lo rodearon y le exigieron un bolso de mano que llevaba, Ibarra habría hecho un movimiento para extraer su arma y uno de los sujetos le disparó a quemarropa.
El suboficial retirado recibió un balazo en el tórax que le provocó la muerte. Entonces, los delincuentes le sacaron las pertenencias a la víctima y huyeron.
La camioneta apareció dos horas más tarde, incendiada, en la zona de Fiorito. En tanto, con datos recogidos en el lugar del hecho, el fiscal Marcelo Domínguez, de la UFI 5 de Lomas, dispuso una serie de allanamientos en viviendas de Ingeniero Budge donde detuvieron a los dos hombres.
En los allanamientos se secuestraron dos pistolas calibre 9 milímetros en la vivienda de uno de los imputados.
El juicio oral
Fuentes cercanas al caso, informaron que durante el juicio oral y público que se desarrolló a principio de noviembre «no se pudo probar la existencia de una camioneta Ford Eco Sport en el hecho». Por otro lado, el arma secuestrada en la vivienda de uno de los imputados «no era el arma homicida».
