Un conocido de la pareja imputada por el crimen de Fernando Marino, un repartidor de productos comercializados en la plataforma Mercado Libre asesinado por dos “motochorros” en 2020, en Adrogué, contó que reconoció a los sujetos en un video y aportó datos para la investigación.
“Yo tenía miedo. No sabía si meterme o no, pero me conmovió el testimonio de los padres de Fernando (en los medios de comunicación). Me acerqué a la comisaría y dije que conocía a las personas que habían hecho eso (el homicidio)”, contó Roque, un vecino del barrio donde vivía uno de los acusados ante los jueces del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 9 de Lomas de Zamora, en el inicio del juicio oral por el asesinato de Fernando Marino (28).
En esa línea detalló: “Del hecho me enteré por la televisión. Me di cuenta por la captura de la moto (de la pareja). Ahí reconocí a Mauro y a la señora. A Mauro lo reconocí por la forma de vestir, él conducía (la moto). Todo el barrio sabía lo que se había mandado, por eso no me quedaban dudas”.
“La pasé muy mal y temí por la seguridad de mi familia”, manifestó el hombre que se acercó a la comisaría de Adrogué y brindó datos de manera anónima. “¿Qué se decía en el barrio?”, preguntó una de las partes y el testigo contestó: “Todos decían que tenía que pagar por lo que se mandó”.
El debate se realizó en la sala segunda en el tercer piso de los Tribunales de Lomas de Zamora. Estuvieron presentes los familiares y amigos de la víctima.
En el banquillo de los acusados están Mauro Sebastián García y Johanna Anabella Quevedo, imputados por los delitos de “homicidio agravado”, “robo agravado” y “tenencia ilegal de arma de guerra”. En el recinto también estuvieron algunos familiares de la pareja.
Desde la fiscalía, en los lineamientos de apertura, Sergio Anauati explicó que la pareja está acusada por dos sucesos. En primer lugar, se refirió al hecho ocurrido el mediodía del 27 de julio de 2020 en las calles Italia, entre Rosales y General Paz, en Adrogué. Marino se movilizaba a baja velocidad con su camioneta Renault Kangoo, color gris, cuando fue interceptado por una moto que manejaba Mauro Sebastián García y Johanna Anabella Quevedo, como acompañante, quienes intentaron apoderase de sus bienes y le efectuaron un disparo que le ocasionó la muerte.
Anauati también hizo referencia a un segundo suceso ocurrido el 29 de julio de 2020, a las 19 horas aproximadamente, en una vivienda de Llavallol. Allí, durante un allanamiento se encontró en poder de los imputados una pistola calibre 9mm marca Browning sin autorización legal.
Por su parte, Carla Arrighi, la defensora de la pareja, argumentó que García y Quevedo son “ajenos” al hecho por el que están acusados.
El debate oral y público continuará los días 24, 28 y 30 de agosto en los Tribunales de Lomas de Zamora.