José Antonio, padre de Fernando Marino (28), el joven que iba en una camioneta que días antes le había comprado a su papá y le dispararon en un intento de robo, contó que su hijo estaba contento con su trabajo como repartidor. Lo dijo en el inicio del juicio oral donde fue uno de los primeros testigos en declarar.
“Era una persona que se quería superar. Ese día se levantó temprano para ir a trabajar y estaba contento porque le había tocado Adrogué”, relató Marino ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 9 de Lomas de Zamora.
Después, mencionó que aquel día Fernando llamó a su pareja y le dijo que Adrogué era “un lugar hermoso”.
“En ese lugar hermoso perdió la vida. Me había pedido la camioneta para trabajar y le pasó eso, todavía no lo puedo creer. Era una persona que ayudaba a la gente, tenía un gran corazón”, expresó.
Aquel 27 de julio de 2020, Marino manejaba su camioneta Renault Kangoo gris a muy baja velocidad por Italia al 900. Allí fue interceptado por dos motochorros armados y con aparente intenciones de robo.
“Sospecho que estaba buscando otra dirección cuando lo sorprendieron”, indicó el padre de la víctima y añadió: “Me parece que no le robaron nada, la gente de mercado libre fue a buscar la mercadería”.
La víctima falleció como consecuencia del disparo. Por el hecho están acusados Mauro Sebastián García y Johanna Anabella Quevedo, detenidos a los pocos días del homicidio en una serie de allanamientos que se realizaron en Burzaco y en Llavallol.
En las viviendas allanadas se incautaron una pistola calibre 9mm marca Browning con numeración suprimida, cascos, teléfonos celulares de los ocupantes, ropa de vestir y zapatillas que se coincidía con la utilizada en el momento del hecho por los asesinos. Esto último se determinó a partir de cámaras de seguridad de casas de la zona y del Municipio de Almirante Brown.
Al día siguiente de realizarse los allanamientos y producirse la detención de la pareja imputada, a escasas cuadras de sus domicilios apareció incendiada la moto utilizada en los hechos, la cual tenía pedido de captura vigente desde diciembre de 2019.