Este miércoles se dio inicio al segundo juicio por el crimen de Paula Santillán, una mujer de 37 años que recibió un disparo en la cabeza en abril de 2017 a la salida de un boliche de Ingeniero Budge.
En la primera jornada del debate oral la fiscal Leila Salem, quien también estuvo a cargo del primer juicio, sostuvo la misma acusación por la que ya fue condenado un hombre en junio de 2019. El hecho ocurrió el 2 de abril de 2017 cerca de las 7 de la mañana en la discoteca conocida como “La Cabaña”, ubicada Camino Presidente Perón al 5100 (ex Camino Negro).
El imputado es Gabriel Alejandro Sosa (28), el presunto cómplice del asesino, quien estaba prófugo al momento del primer juicio.
Sosa tenía pedido de captura por ser considerado coautor del delito de “homicidio agravado por el empleo de arma de fuego” y fue detenido en abril de 2022 en Monte Grande.
En junio de 2019, el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 8 de Lomas de Zamora condenó a 20 años de prisión a Carlos Daniel Martínez.
En sus lineamientos de apertura, la representante del Ministerio Público Fiscal aseguró ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 2 de Lomas de Zamora que “dos personas que fueron identificadas como Gabriel Alejandro Sosa, alías “Pilo”, y Carlos Daniel Martínez dieron muerte a Paula Santillán”.
Sostuvo a su vez que, los imputados “circularon con un auto por cercanías del boliche La Cabaña, y comenzaron a disparar con armas de fuego hacía el lugar sabiendo que podían asesinar a una persona”.
La defensora Liliana Pérez, en representación de Sosa, manifestó que intentará demostrar que el imputado “nunca tuvo conocimiento de lo que pretendía hacer Martínez (Carlos)” y adelantó que solicitará la absolución.
Los primeros testimonios
Un amigo de Paula, Jonathan, fue el primero de las ocho testigos de la jornada, y recordó que estaba saliendo del boliche junto a la víctima cuando escuchó los disparos y de inmediato vio a caer a la joven. “A Paula la subimos a un coche con varios chicos y la acompañé hasta el hospital”, contó. Y agregó: “Se rumoreaba que hubo una pelea dentro del boliche y que sacaron a dos chicos”.
También brindo su testimonio la madre de Paula, Patricia Besares, quien relató cómo se enteró del homicidio. “Mi hija del medio llegó corriendo a mi casa y nos dijo que le habían pegado un tiro a Paula. Nos tomamos un remis con mi marido y nos fuimos para el hospital pero cuando llegamos ya estaba muerta”.
Al finalizar el testimonio de la madre de la víctima, la fiscal solicitó a los jueces que el público presente abandone la sala de audiencia, ubicada en el tercer piso de los Tribunales de Lomas de Zamora, para escuchar a una testigo de nombre Milagros, quien en el primer juicio también había declarado de esa manera. El testimonio a puertas cerradas de la joven que al parecer conocía a los acusados y tenía información clave se extendió por casi una hora.
Otra de las declaraciones destacadas de la jornada, fue la de un policía de la dirección de homicidios, Diego López, quien participó de un allanamiento en una vivienda de Llavallol donde se halló el vehículo que los acusados usaron en el hecho. El efectivo también relató que participó de la búsqueda de tres mujeres que habrían estado con los autores del crimen y que se las consideraba importantes para la investigación.
A su turno, Celeste, la hija de Paula, recordó que el 2 de abril de 2017 su madre la acompañó al boliche bailable de Ingeniero Budge donde esa noche se presentaba un grupo de cumbia. En el lugar también estuvieron presentes sus tías Valeria y Camila.
La testigo contó que en un determinado momento se desató una pelea, que no vio las caras de los involucrados en la riña pero recuerda que “no querían salir”. Finalmente, lograron sacarlos del lugar y la diversión continuó.
“Yo quería quedarme y le pedí a mi mamá que se vaya pero ella no quería, hasta que la convencí. Al rato me avisaron que estaba herida y cuando salí (del lugar) la encontré muerta”, explicó.
Celeste relató que horas después del hecho, una vecina de nombre Milagros, le envió un mensaje donde le decía que sabía lo que había ocurrido. Ambas se reunieron. “Milagros me contó que las dos personas (por los acusados) la pasaron a buscar y se fueron a una casa. Los dos (Sosa y Martínez) tuvieron una discusión porque uno le dijo que dispare hacia arriba y el otro disparó directamente hacia el boliche”, señaló.
El juicio continúa este jueves con más testimonios y la defensa adelantó que el acusado tiene intenciones de declarar.
El CRIMEN
La muerte de Paula Santillán ocurrió el 2 de abril de 2017 a las 7 de la mañana en la puerta de la discoteca conocida como “La Cabaña”, ubicada en Camino Presidente Perón al 5100 (ex Camino Negro), y de acuerdo con la instrucción, Carlos Daniel Martínez y Gabriel Alejandro Sosa habían sido expulsados del boliche por patovicas.
Los dos acusados volvieron armados en un auto y efectuaron disparos hacia el boliche. Uno de los proyectiles impactó en la cabeza de la víctima, de 37años, quien murió en el lugar.
Martínez fue detenido recién 5 meses después del hecho. En tanto, el joven que lo acompañaba estuvo prófugo hasta abril de 2022.
