umbanda, de 52 años, acusado de abusar sexualmente, privar de su libertad y reducir a servidumbre a una mujer que se acercó a su templo de Fiorito, en Lomas de Zamora, en busca de curarse de una enfermedad en sus articulaciones.
El juez Jorge López hizo lugar al pedido de la fiscal de Lomas Marcela Juan y dictó la preventiva por los delitos de de “coacción, reducción a la servidumbre, abuso sexual gravemente ultrajante con acceso carnal agravado por ser el autor ministro de un culto, por el empleo armas, lesiones leves agravadas por haber sido perpetradas por un hombre hacia una mujer mediando violencia de género, amenazas y tenencia ilegal de arma de guerra, todo ello en concurso real entre sí, en el contexto de violencia de género”.
Según acusación fiscal, todo comenzó en febrero último cuando un pai umbanda, de nacionalidad brasilera, de 52 años, comenzó a amenazar de muerte a una mujer de 49 años que asistía a su templo ya que buscaba la sanación a una enfermedad que sufría.
«Te voy a hacer mierda»
El sujeto le mandaba fotos de sus armas y le decía: “Te voy a hacer mierda”. Así, valiéndose de la situación de vulnerabilidad de la víctima logró que fuera a vivir con él en una vivienda de la calle Bucarest en Fiorito.
Allí comenzó el infierno para la mujer. El pai umbanda no sólo la siguió amenazando de muerte sino que abusó sexualmente de ella en reiteradas oportunidades, en el transcurso de los tres meses que la víctima padeció los delitos.
“La sometía a malos tratos permanentes y la obligó a ser su pareja, separándola de familiares y amigos”, sostuvo una fuente ligada a la investigación en diálogo con DiarioConurbano.com.
De acuerdo a la acusación, el pai umbanda no la dejaba salir sola de la casa, ni usar el celular o las redes sociales sin su control.
“La obligaba a consumir alcohol y a filmar videos de contenido sexual”, agregaron las fuentes consultadas por este portal.
A principios de abril, el imputado la sometió a una durísima golpiza a la mujer, tras lo cual ella logró evadir sus “controles” y dio aviso a un allegado que hizo la denuncia y fue liberada.
Tras la ratificación de esa denuncia, la fiscal Marcela Juan ordenó la detención del pai umbanda brasileño. En la vivienda-templo se secuestraron dos revólveres calibre 38 y 32 y una pistola 22.
En su declaración indagatoria, el imputado aseguró que la mujer se encontraba con él por voluntad propia y negó todas las imputaciones.
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