Los primeros resultados de las autopsias a Brenda Castillo, Morena Verri y Lara Morena Gutiérrez revelaron que las tres jóvenes fueron torturadas antes de ser asesinadas en una vivienda de Florencio Varela. Según los informes, las muertes ocurrieron entre la medianoche y las 2 de la madrugada del sábado.
El último contacto con sus familias había sido el viernes a las 21.30, y se estima que llegaron a la casa donde fueron atacadas alrededor de las 23.30.
Violencia extrema en las tres víctimas
Una de las mujeres mayores presentaba fractura de cráneo, heridas punzocortantes en el cuello y lesiones aplastantes en el rostro, compatibles con una golpiza brutal. La otra víctima adulta sufrió una luxación cervical, golpes graves en el rostro, manos y pies atados con cinta, y cortes en el cuello y la cara que habrían sido realizados después de su muerte para dificultar la identificación.
La menor de edad fue la que recibió mayor ensañamiento: tenía cortes en los dedos de la mano izquierda, heridas profundas en el rostro, cuello y oreja, además de quemaduras en los dedos producidas en vida. Los peritos consideran que fue sometida a torturas para obtener información antes de ser asesinada.
Una cita bajo engaño y una amenaza previa
La investigación apunta a que las tres jóvenes fueron atraídas mediante una falsa propuesta económica. Además, en los días previos, la adolescente había recibido un mensaje amenazante: “Devolve lo que robaste”.
Los investigadores no descartan que el triple femicidio esté vinculado a una banda narco que habría actuado con extrema violencia.