Se trata de Rodrigo Ortiz Días, un nene que se sintió descompuesto el domingo pasado, y que pese a haber sido llevado por su mamá a dos guardias médicas, murió a las horas en la casa en la que reside su familia, en 121, entre 521 y 522, en Tolosa, luego de padecer durante horas un malestar generalizado.
La mamá del menor relató que su hijo comenzó a sentirse mal el domingo por la tarde y que si bien, en un principio creyó que se trataba de un simple dolor de panza, los vómitos y el estado de decaimiento la alarmaron y la obligaron a dirigirse al Hospital Gutiérrez.
“Allí lo mandaron a la casa diciendo que era gastroenteritis, me dijeron que estaba deshidratado y me dieron una sales, que le dé un poco de agua y que, capaz, era algo que comió”, dijo la mamá en declaraciones a la prensa.
Sin embargo, el nene siguió empeorando, por lo que alrededor de las 4 de la madrugada decidieron ir al Hospital de Niños Sor María Ludovica, donde lo evaluaron, le diagnosticaron gastroenteritis y lo devolvieron a su casa.
«El dolor de panza seguía. El nene se puso pálido y el vómito negro», agregó Gabriela, la mama del niño, luego de descartar síntomas similares en otros miembros de la familia.
La mujer explicó que, al llegar a la casa se fueron a dormir pero que a las 10.30 se dio cuenta de que su hijo no tenía signos vitales y llamó a la Policía, que terminó confirmando su muerte poco después.
«Le dieron una medicación para la deshidratación y cuando me desperté, lo encontré así. Fuimos al hospital para que esté mejor. Esto no lo puedo creer», agregó la madre en diálogo con medios locales.
Ante la situación, la familia del menor hizo la denuncia y pide explicaciones a los hospitales por «no haber atendido como debía» a su hijo.
«Quiero que se hagan cargo y me digan por qué me dieron este remedio», completó la mujer.
Qué dijo Provincia
«Al momento de ambas consultas médicas no evidenciaba signos de alarma. Esta dirección se encuentra trabajando en la investigación del caso», dijeron a Télam desde la cartera sanitaria.
En este sentido, la UFI Nº 7, a cargo de la fiscal Virginia Bravo, inició la instrucción de la causa por el deceso del niño caratulada como “averiguación de causales de muerte”.