«Cuidar la salud de los trabajadores es también defender sus derechos a una vida digna. Estas jornadas muestran el lugar del sindicalismo en la sociedad: comprometido, presente y humano», afirmó el Secretario General Rubén Crosta al abrir el encuentro realizado en el Sindicato de Empleados de Comercio de Lomas de Zamora, en el marco del mes de octubre, dedicado a la lucha contra el cáncer de mama.
La actividad reunió a delegados y delegadas gremiales, autoridades del sindicato y profesionales de la salud, en una jornada de formación y concientización sobre una enfermedad que, detectada a tiempo, puede ser curable.
Participaron del encuentro la Secretaria de la Mujer Claudia Ruiz, la Secretaria de Previsión y Asistencia Social Mónica Macia, la Dra. Tatiana López —ginecóloga especializada en salud femenina— y la Cra. Roxana Ortiz, quien compartió su testimonio como sobreviviente de cáncer de mama.
Ruiz subrayó el rol estratégico de los delegados y delegadas como agentes multiplicadores: «Cada uno de ustedes puede llevar esta información a los lugares de trabajo, acercar herramientas de prevención y generar conciencia. Esa es una forma concreta de cuidar a nuestras compañeras.»
La Dra. López explicó las características del cáncer de mama, los factores de riesgo y las prácticas preventivas necesarias para su detección temprana. Mónica Macia detalló la cobertura médica que ofrece OSECAC, destacando la importancia de acceder a controles periódicos y estudios de diagnóstico.
El momento más conmovedor de la jornada fue el testimonio de Roxana Ortiz, quien compartió su experiencia personal: «Pasé por momentos muy difíciles, pero hoy estoy acá para decirles que se puede. Que no hay que tener miedo, que hay que hacerse los controles y hablar del tema.» Su relato emocionó a todos los presentes y reforzó el mensaje de esperanza y acción.
El cierre estuvo nuevamente a cargo de Rubén Crosta, quien agradeció la participación y el compromiso colectivo: «La lucha contra el cáncer de mama no es solo una cuestión médica, es también una causa sindical. Porque cuando defendemos la salud, defendemos la vida. Y cuando nos organizamos para prevenir, estamos construyendo un sindicalismo que abraza, que cuida y que transforma.»
«Gracias por estar, por escuchar, por comprometerse. Sigamos haciendo del sindicato un espacio de conciencia, de solidaridad y de acción colectiva.» concluyó Crosta.
