En el marco de un proyecto de talleres de oficios, detenidos de la Unidad Penal 40 de Lomas de Zamora realizaron una prótesis ortopédica para un joven de 18 años de Almirante Brown, al que por un tratamiento oncológico se le tuvo que amputar una pierna.
En diálogo con DiarioConurbano.com, Natalia Barreiro, Directora de Derechos Humanos de Almirante Brown, aseguró: “Estaría muy bien que se refuercen este tipo de programas porque los detenidos contarían con los suministros necesarios para desarrollar sus conocimientos y generar un ambiente distinto en la cárcel”.
Por su tratamiento oncológico, Lorenzo, de Ministro Rivadavia, partido de Almirante Brown, debió ser operado y perdió su pierna. Es por eso que le solicitó al Ministerio de Desarrollo Social el subsidio que le corresponde para la entrega de la prótesis que necesita. En esta línea, desde la Unidad Carcelaria comenzaron a realizar talleres de oficio hace un año y medio, y uno de los detenidos realizó un prototipo de prótesis ortopédica.
Debido a que Lorenzo hacía tres meses espera a que el Gobierno nacional le entregue la prótesis, se le ofreció al joven la posibilidad de adquirir una prótesis realizada por los detenidos de la Unidad, y así empezar a ejercitar el uso de la misma. “El Gobierno nacional realizó uno de lo recortes más grandes en ese programa y desde el Municipio de Brown no tenemos los recursos económicos para satisfacer la prótesis que él se merece”, aseveró.
Además, Barreiro explicó: “La Dirección de Derechos Humanos se puso en contacto y les alcanzamos los materiales a los detenidos para que le realicen una a Lorenzo. Al principio, iba a ser de madera pero probaron con el aluminio liviano y funcionó bien”.
Los detenidos realizaron varias piezas ortopédicas para familiares o detenidos de la Unidad. Algunas de las prótesis fueron armadas con la reutilización de componentes usados de computadoras u otros materiales. Según lo relatado, cuando surgió la iniciativa de armar un proyecto sobre el tema, un docente los orientó y los detenidos pudieron usar las herramientas de los oficios que realizaban mientras estaban en libertad.
Con respecto a la participación de los detenidos, Barreiro sostuvo: “Son muy importantes los talleres porque generan un sentido de solidaridad en un contexto tan violento como la cárcel. Además de aprender a realizar un material físico, les queda el sentido de solidaridad colectiva”.
