La familia Liemich, quienes son integrantes de la Unión de Trabajadores de la Tierra (UTT), denunciaron agresiones con armas de fuego en sus tierras ubicadas en José Hernández 3565, Esteban Echeverría, con el objetivo de usurparles sus campos por parte de una de las dos constructoras con las que mantienen un largo conflicto. Además señalaron desidia policial e inacción por parte del municipio. Si bien el hecho se registró en la mañana del pasado martes 30 de enero, recién en las últimas horas se dio a conocer el hecho donde Guillermo Liemich fue objetivo de balas de plomo por parte de individuos identificados con una de las empresas que buscarían despojar a su padre de su terreno para la construcción de lotes en venta.
Mariana Garófalo, esposa de Guillermo y nuera y vecina lindera de Alberto (presidente de la UTT), consignó a DiarioConurbano.com que la agresión se dio luego del volteo del alambrado que delimita su propiedad en un intento de “loteo ilegal” que se da en un área zonificada como rural.
“Tiraron 300 metros de alambre y cuando Guillermo escuchó las máquinas mientras estábamos cosechando se acercó a decirles que paren, pero lo agarraron entre cinco y se trenzaron en una pelea”, relató la también integrante de “Familias productoras de Esteban Echeverría” y Secretaria y Delegada de la Base Echeverría de la UTT.
Tras la refriega, Garófalo consignó que su esposo volvió en dirección a su casa corriendo y “cuando se quiso volver a acercar, uno de los dos que estaban armados le dispararon dos veces”. Si bien explicó que Liemich se parapetó detrás del pilar donde baja el cableado de la instalación eléctrica y no fue herido, sostuvo que hubo una clara intención de atentar contra su vida.
“Estaban lejos, como a 500 metros; pero vi a la persona que estaba apuntando. Estaba dentro de la casa con nuestro hijo, pero estaba apuntando, no fue un tiro al aire”, describió sobre el momento.
Luego de ser atacados realizaron la denuncia en la comisaría de Canning, indicó que “la policía no quería ni siquiera entrar al terreno”, pero una vez que lo hicieron y pese a que los agresores, quienes no pudieron ser identificados con nombre y apellido, estaban allí presentes “no se los revisó para saber si estaban armados, no se fijaron si estaban los casquillos de las balas y les pidieron los números de documentos, no los documentos”.
“Ellos hicieron la denuncia de que Guillermo estaba armado y por eso dispararon, pero nada que ver porque no tenemos armas y ni siquiera revisaron para saber si teníamos”, completó en ese sentido sobre el accionar policial y la reacción de los integrantes de una de las dos empresas constructoras.
La agricultora remarcó que los conflictos se dan casi a diario, tanto con su familia como con la de sus suegros, y que pese a los llamados y la intervención de la policía las mismas fuerzas de seguridad llevan a ambas partes a realizar sus respectivas denuncias pero nada supera esa instancia.
Desde la UTT denuncian que desde hace una década son víctimas del “negocio inmobiliario, los countrys, la especulación por la tierra y la complicidad del poder político que desaloja pequeños productores de sus tierras”, además de “matones amparados por la inacción y complicidad del municipio, cuyo intendente es Fernando Gray”.
También reiteraron el pedido al municipio de Esteban Echeverría de declarar a la zona como “Área de Reserva de Pequeños Productores” para proteger a los pequeños agricultores locales, tal como presentaron en formato de Ordenanza Municipal hace pocos meses.
