Luciano Álvarez, un hombre condenado en 2017 por un crimen cometido en Lanús, comenzó a contar su historia a través de las redes sociales y denuncia que fue víctima de una causa armada. Al obtener una respuesta favorable de sus seguidores, describió con detalles cómo fue su vida desde los 14 años hasta hoy.
Bajo el nombre de “Locuraaa1” en Tik Tok y con más de 17 mil seguidores, dio a conocer todo lo que atravesó desde que comenzó a consumir cocaína hasta la condena de marzo de 2017.
“Hace seis años que mi familia y yo vivimos esta pesadilla. Quiero hacer viral lo que está pasando y no voy a parar hasta que me escuchen”, afirmó Luciano en su primer video.
En julio de este año y en plena pandemia Luciano decidió crear contenido en Tik Tok, Instagram y Youtube para comunicar de primera mano sus problemas durante la adolescencia, los trabajos por los que pasó y el proceso judicial que vivió luego del asesinato de Alberto Bermúdez, sucedido en 2014, en Lanús Oeste, y por el que fue condenado junto a otro joven.
“Antes de estar privado de la libertad era un chico igual que tu hijo con la diferencia de que tuve la desgracia de conocer la droga a los 14 años. De ahí en adelante mi vida empezó a desmoronarse”, relató el joven que hoy tiene 29 años.
En sus primeros videos contó que «a través del vicio» comenzó a vincularse con personas afines al consumo y que todo se complicó aún más. Abandonó la escuela para trabajar mientras su padre era chofer de micros de larga distancia y estaba poco en su casa, y su madre sufría trastornos de bipolaridad.
“Con mamá internada y papá viajando no tenía a nadie que me controle. A partir de ese momento agarré un poco de calle y conocí gente del palo pero jamás se me cruzó por la cabeza salir a afanar”, aseguró Luciano Álvarez. Según lo relatado en los primeros 18 videos, Luciano espera llegar a contar todo lo que sucedió y la injusticia que vivió tras la condena.
El hecho que se le atribuye es el homicidio de Alberto Bermúdez, ocurrido en Villa Diamante, partido de Lanús, el 7 de octubre de 2014. Se estima que desde un principio, el abogado defensor de Álvarez intentó demostrar que él no se encontraba en el lugar de los hechos ya que había tenido una discusión por drogas y terminó en el UPA de Fiorito para ser atendido por sus heridas.
Según el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N 4, cuando Alberto Bermúdez circulaba en su auto Volkswagen Gol gris, fue interceptado por dos personas que se movilizaban en una moto. Al resistirse de abandonar el vehículo, le dispararon tres veces a Bermúdez.
