En la segunda jornada por el juicio de Miguel Ángel Alaniz, un hombre en situación de calle que fue prendido fuego en 2017, se presentaron testimonios claves sobre lo sucedido durante el hecho. El único imputado es Emanuel Ramiro Sueldo, de 24 años, quien se estima que era trapito de la zona.
El primer testigo de la jornada, un policía que recorría la zona aquel día, aseguró: “Vino un transeúnte que me informa que en el Banco se estaba prendiendo fuego algo y vi que era un ser humano”. También explicó que cuando llegó “ya estaba muerto” y según su relato “era un hombre que estaba durmiendo con frazadas encima”. El testigo se quedó en el lugar del hecho, el Banco Santander, ubicado en la avenida Yrigoyen, entre Boedo y Sáenz, hasta que se levantó el cuerpo.
Por su parte, se presentó un hombre que pasaba todos los días por el Banco para ir al trabajo y conoció a Alaniz. “Cuando pase esa mañana me llamó la atención ver fuego y me alarmé. Me acerqué y vi un charco de sangre enorme y el fuego cubría todo el cuerpo. Busqué a un Policía pero supuse que era él porque fue donde dormía”, especificó el testigo. El hombre conoció a la víctima porque Alaniz era vendedor de pañuelos descartables y encendedores.
En esta línea, también un trabajador de la Pizzería Masabrosa, desarrolló su conocimiento sobre lo sucedido y destacó que Analiz “era educado, limpio y respetuoso”.
“Él sufrió agresiones por parte de un grupo de cinco, seis personas de la Plaza Grigera que solían estar en el semáforo”, afirmó el hombre. Según lo relatado, el hombre una ocasión se peleó con dos de ellos porque Alaniz “estaba asustado y comenzaron a merodear alrededor de él y a molestarlo”.
Además, el testigo describió lo que observo en el video de las cámaras de seguridad del Banco. “Veo a un individuo que tenía capucha, de estatura normal que se sentó al lado de los pies de Miguel y después de irse y volver lo apuñaló. Agarró el carrito que tenía Miguel y se fue para la Plaza Grigera”, señaló Malines quien le daba comida y bebida a la víctima en la pizzería.
Sueldo es juzgado por el delito de homicidio doblemente calificado criminis causa con alevosía en concurso real por robo simple y el debate oral está a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 3 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora.
Por otro lado, una mujer que también trabajaba en la Pizzería, aseveró que la última vez que lo vio a Alaniz “lo notó triste porque unos chicos de la Plaza le habían pegado”. “Una vez me dijo que tenía miedo porque iban a robarle y por eso guardaba un cuchillo abajo de la almohada”, contó la mujer.
En esta línea, manifestó que un hombre también en situación de calle que dormía en la zona, le había contado que un chico lo amenazó con la frase: “Lo mismo que le hice el otro viejo te va a pasar a vos”.
Además testificó que otra mujer apuntó contra “un tal Emanuel” sobre el homicidio de Alaniz. “Miguel buscaba un lugar donde mudarse por las agresiones que sufría”, reveló.
El cuerpo de Alaniz fue encontrado carbonizado el 11 de abril de 2017 en las puertas del Banco y luego de la autopsia se concluyó que antes de ser prendido fuego, fue herido con un arma punzante. La víctima se dedicaba a la venta ambulante y dormía frente a la entidad bancaria. Si bien al principio se sospechó por la tenencia de unos cigarrillos que el fuego podría haberse ocasionado accidentalmente, la autopsia determinó que no fue así.
