Un fiscal de Lomas de Zamora pidió 9 años de prisión para un ex comisario de Ingeniero Budge acusado de privar ilegítimamente, extorsionar y abusar sexualmente de una feriante. En tanto, solicitó 4 años para un ex oficial por extorsión. En tanto, al defensa de los policías planteó que se los absuelva.
Rossi afirmó que el día 14 de junio de 2016 “al menos tres efectivos interceptaron a Liliana Herrera y la trasladaron a la Comisaría de Budge, donde fue recibida por el comisario Eliazar Beckman”. Los Policías son acusados de extorsión, privación ilegal de la libertad y abuso sexual -en el caso de Beckman-. “La extorsión es la única explicación razonable de lo que ocurrió. En ese contexto de impunidad se produce un abuso sexual cuando Beckman trasladó a Herrera al altillo, lo que es un hecho ultrajante hacia la víctima”, manifestó el fiscal a cargo. El otro acusado es el oficial Gerardo Ibarra, a quien se le imputa sólo la extorsión.
Herrera es una mujer que trabajaba en la feria de Olimpo y fue trasladada a la Comisaría N° 10 de Ingeniero Budge, en donde le dijeron que para continuar en la feria debía abonar una coima por semana de 5 mil pesos. Su marido al enterarse insistió en la puerta de la Comisaría para que Herrera obtenga su libertad, quien estuvo más de cinco horas privada de su libertad.
En este sentido, Rossi señaló: “Se insinuó con algunos testigos que había sido un plan para perjudicar a los imputados pero la velocidad de la denuncia luego del hecho descarta cualquier tipo de plan”.
El fiscal apuntó que se intentó relatar como “normal” las irregularidades de la Comisaría. “Cuando una persona va a denunciar no hay motivos para requisarla y si se la quería cuidar, no se entiende porque se la dejaba pasear como dijeron”, aseveró Rossi. Además, Rossi remarcó que en el libro de guardia mientras no se registró el horario de entrada de la mujer, si se hizo con el horario de salida; y se anotó cuando fue al baño. “En toda la experiencia que tengo, nunca vi que se anotara cuando alguien va al baño en una Comisaría”, sostuvo Rossi.
A su vez, el representante del Ministerio Público Fiscal solicitó que se consideren los agravantes de la duración del tiempo, la pluralidad de intervinientes, la falsedad en la documentación pública, el grave daño ocasionado a la víctima originado de la violencia física y psicológica. También se refirió a que las pericias psicológicas que se le realizaron a la víctima se descartó la “fabulación” y se reconocieron señalamientos por abuso sexual.
Por su parte, la defensa solicitó la absolución de los imputados pero en el caso de que se los encuentre culpables, se acuse al resto de los policías que también participaron del hecho. “No comparto lo expuesto por el fiscal. A Herrera se la llevó para resguardarla como se corroboró en la foto que se veía que mucha gente de la feria la comenzó a increpar y la querían agredir”, planteó el abogado. También argumentó que los testigos coincidieron en que en ningún momento Herrera se quedó sola y que “la vieron tranquila”. Con respecto a las irregularidades del libro de guardias, la defensa afirmó que “quedó claro que los encargados del libro no son los imputados”.
Además, señaló que la víctima declaró en tres ocasiones y que “sumó hechos y situaciones que no había manifestado antes”. “Sumó golpes, acceso carnal y mordidas, que no surgen de la pericia”, relató el abogado de los imputados.
