Los jueces de Lomas de Zamora consideraron que el imputado mató de un tiro a la víctima excediéndose en su legítima defensa. Le aplicaron seis años de prisión. El fiscal había pedido prisión perpetua al encuadrar el hecho en el delito de homicidio agravado.
Un suboficial de la Policía bonaerense fue condenado este jueves a seis años de prisión por el homicidio, cometido al excederse en su legítima defensa, de un joven al que intentó detener cuando compraba una cerveza, el año pasado, en Gerli, informaron fuentes judiciales.
La pena dispuesta en un fallo unánime por el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 1 de Lomas de Zamora, integrado por los jueces Fernando Bueno, Roberto Lanza y Lidia Moro, recayó sobre el teniente Hernán Salvatierra (30), quien seguirá detenido por haber matado a Jonatan Alexis Cabrera (27).
Fuentes judiciales informaron que si bien el fiscal de juicio Guillermo Morlacchi había solicitado al TOC que condene al acusado a prisión perpetua por el delito de "homicidio agravado por su condición de policía", el tribunal encuadró el hecho en una "legítima defensa" y, en ese sentido, "consideró que el policía se excedió en su accionar".
En los alegatos, el abogado de la familia de la víctima, Marcelo Britos, en su carácter de representante del particular damnificado, había coincidido con el fiscal Morlacchi y pedido la misma pena y por el mismo delito.
En tanto, la defensa de Salvatierra había requerido la absolución por entender que Salvatierra actuó en su "legítima defensa" y que al momento del hecho estaba "cumpliendo con su deber" y, subsidiariamente, que reciba una pena por un "exceso" en su accionar, tal como finalmente ocurrió.
Si bien se trata de una pena menor a la solicitada por las partes acusadoras, es de cumplimiento efectivo, por lo que Salvatierra, quien lleva preso un año y medio, deberá permanecer en la cárcel hasta cumplir, al menos, las dos terceras partes de la condena y esté en condiciones de recibir una morigeración de su detención.
"Estoy totalmente en desacuerdo con el fallo. Es muy injusto según todo lo que se planteó en el juicio", dijo hoy, indignada, Aldana Leber, madre de Cabrera.
La mujer adelantó que van a apelar el fallo porque "nunca" esperó que le dieran "tan solo seis años", al tiempo que volvió a negar que su hijo estuviese armado al momento del hecho, como sostuvo la defensa del policía.
El hecho ventilado en el debate ocurrió el 28 de febrero de 2013, alrededor de las 14.30, en la esquina de Lavarello y Coronel Casacuberta, de Gerli, donde Cabrera fue hasta un quiosco del barrio a comprar una cerveza.
Mientras eso ocurría, un llamado al 911 alertó a la Policía sobre una persona que estaba robando en la zona, por lo que Salvatierra, quien prestaba servicios en la Policía Buenos Aires 2, se trasladó hasta el quiosco a bordo de un patrullero.
Al descender del vehículo, el teniente le exigió a Cabrera tirarse al piso, pero éste se negó porque tenía las piernas lastimadas a raíz de un accidente ocurrido días atrás.
De acuerdo a las pruebas recogidas, Salvatierra primero efectuó un disparo con posta de goma y luego un balazo con su pistola reglamentaria calibre 9 milímetros que impactó en la espalda del muchacho.
Cabrera fue trasladado al Hospital Presidente Perón, donde los médicos comprobaron que el proyectil ingresó por la parte derecha de la espalda, atravesó la aorta y salió a la altura del omóplato izquierdo, lo que le provocó la muerte cuatro horas después.
En tanto, el personal policial secuestró en la escena del crimen una pistola calibre.25 con dos proyectiles que presuntamente portaba Cabrera.
